Los chicos de Hidden Valley Road - Robert Kolker
"Mientras iba creciendo la familia, el matrimonio Galvin asistió a la llegada y el desvanecimiento de movimientos culturales, y, finalmente, entre todos ellos hicieron su propia contribución a la cultura al convertirse en un monumental caso clínico de la enfermedad más desconcertante del ser humano".
Robert Kolker
Editorial: Sexto Piso
Año: 2020
Sinopsis: Donald y Mimi tuvieron doce hijos. Los doce, enmarcados en pleno baby boom, entre 1945 y 1965. De puertas para fuera eran una familia modelo. Pero de puertas para dentro pronto sus vidas se torcieron. Seis de los diez hijos varones desarrollaron esquizofrenia a lo largo de su adolescencia y juventud.
La tremenda ignorancia que existía sobre este trastorno en aquellos años marcó sus vidas y las de sus familiares. Internamientos, terapias de choque, extensa medicación, llevó a los chicos al límite. Empujándoles al suicidio en algunos casos, dejándoles con terribles secuelas en otros.
Además, la violencia se volvió contra los propios miembros de la familia Galvin. Con ello, el peso de su historia marcó de por vida a toda la familia, cuyo via crucis se narra en esta crónica negra novelada, que sirve tanto como biografía familiar como de retrato de la sociedad estadounidense de aquella época.
Por qué recomendamos 'Los chicos de Hidden Valley Road', de Robert Kolker
Primero, porque la historia de la familia Galvin es fascinante. El azote de los diferentes ataques psicóticos a media docena de sus miembros se vivió casi como una maldición. Por lo que el relato de aquellos años no solo parece una novela de terror, sino que además lleva en sí misma la carga de la realidad que lo hace aún más terrible.
Segundo, porque el pulso narrativo del periodista estadounidense Robert Kolker es magnífico. La historia se va elevando con el paso de las páginas, relatada de un modo tan ameno como fiel a la realidad. Un portentoso ejercicio de literatura que convierte los años de los Galvin en episodios de una serie adictiva.
Y tercero, por una estructura, creada en base a los miembros de la familia, que no deja huecos. Que cubre todos los espectros de la tragedia, desde el que la vivió en primera persona, como los que la sufrieron desde más o menos cerca. La presión social que tuvo que soportar la madre o la violencia y los abusos que sufrieron las dos hijas, las más pequeñas e indefensas de toda la familia.