La novela sobre almas rotas de la que no te hablaron el año pasado (y que hay que salvar del enjambre de novedades)
Las luces de Hannover podría pasar por una colección de relatos independientes, pero todos tienen un eje central: el secuestro de unos de los personajes. Con este artefacto literario, Abraham Guerrero Tenorio ha ganado el Premio de Novela Universidad de Sevilla.
Abraham Guerrero Tenorio
Editorial: El paseo
Fecha de publicación original: 2023
La vida de los libros cada vez es más corta. Solo los lectores, comprando y leyendo y recomendando y regalando, podemos conseguir que algunos sobrevivan al enjambre de novedades que coloniza las librerías cada mes.
Pienso en En el cielo de la selva, de Elaine Vilar Madruga, o en Martinete del rey sombra, de Raúl Quinto. Historias diferentes de autores (todavía) desconocidos para el gran público y que solo editoriales pequeñas se atreven a publicar.
A ambos les ha llegado un merecido e improbable reconocimiento. También a Las luces de Hannover. Que estemos ahora, en mayo de 2024, hablando de un libro publicado en julio de 2023, ya dice mucho de la hazaña de una ¿novela? que bien merece seguir llegando a muchos lectores.
Una gran novela (de relatos)
Estamos ante una novela (que no parece), un thriller (que no lo es tanto) y un libro de relatos (que pudo haber sido). Las luces de Hannover (no) es muchas cosas. Y ahí reside la magia de una historia de historias que está sostenida, además, por un misterio que sobrevuela las 140 páginas.
'Las luces de Hannover' es una obra hecha de almas rotas
El secuestro de uno de los personajes es el misterio. El punto de partida. Una excusa, en realidad, para poner en órbita once capítulos con vida propia en los que hay sexo, infidelidades y violencia. Todos atraviesan zonas oscuras, pero se mueven diferente y suenan distinto. Cada uno posee una voz, una mirada, un ritmo, un estilo y, sin embargo, dentro de esas diferencias, los relatos juegan a encontrarse hasta tejer una fina tela de araña.
Hay un extraño desequilibrio que funciona a la perfección. Y resulta paradójico, porque Las luces de Hannover es una obra hecha de personas imperfectas, de almas rotas. "Si pudierais entrar en mi mente solo durante una hora", lamenta Robert, cegado por "los faros del tren que se le acumulan en los ojos cuando los cierra".
Vidas que descarrilan
Un inmigrante español, un poeta frustrado o un antiguo matón de colegio son algunos de los personajes a los que acompañaremos por una fría y violenta Hannover hasta descubrir qué ha ocurrido con la persona desaparecida. A través de ellos, Abraham Guerrero Tenorio reflexiona sobre cuestiones generacionales como la precariedad, el bullying, la soledad o la depresión. "Es curioso cómo la vida de algunas personas viene a descarrilarse con la de otras", dice uno de ellos.
Comprad, leed y recomendad esta ¿novela? Hay que salvarla del enjambre de novedades
Seguramente me equivoque -me equivoco mucho-, pero hay un puñado de momentos que transmiten tanta verdad, que cuesta no pensar en que haya algo del propio autor en ellos. Es como si se hubiera deconstruido para dar forma a algunas de las criaturas que transitan, desorientadas, estas páginas. Pero solo son sensaciones.
Más claro tengo que La luces de Hannover es un gran debut narrativo. Hasta ahora Abraham Guerrero Tenorio había publicado dos poemarios (Los días perros y Toda la violencia), y como poeta tiene la envidiable capacidad de seleccionar la palabra exacta para cada momento. Tal vez por eso sean tan breves las últimas novelas que he leído de poetas. Y está bien. Para qué escribir más pudiendo escribir menos. Así que comprad, leed y recomendad esta ¿novela? Hay que salvarla del enjambre de novedades.