El método japonés para ahorrar dinero que te ayuda a llegar a final de mes sin pasarlo mal 

El método japonés kakeibo (pronunciado como 'kah-keh-boh') es una forma de organizar las finanzas y ahorrar. Fue creado en 1904 por Hani Motoko y este método de ahorro ha sido utilizado en el país por muchos años. Es manera muy sencilla de ahorrar, dándole prioridad a pensar en retrospectiva y analizar subjetivamente cada compra. No hacen falta aplicaciones especiales, hojas complicadísimas de Excel ni aplicar fórmulas matemáticas complicadas.

Para realizar el kakeibo solo hacer falta que tengas lápiz y papel. A la vieja escuela. Es muy importante que se escriba a mano ya que el método depende de los efectos de escribir uno mismo. Esto ayuda a analizar e interiorizar el proceso para poder llegar a las conclusiones importantes.

En este papel, será necesario escribir y responder una serie de preguntas muy importantes.

• ¿Puedo vivir sin esto que quiero comprar?
• Tomando en cuenta mi situación financiera, ¿puedo permitírmelo?
• ¿De verdad lo voy a usar?
• ¿Tengo espacio?
• ¿Cuál es mi estado emocional en estos momentos?
• ¿Cómo me siento comprándolo? Y ¿cuánto durará esta sensación?

Estas preguntas nos permiten pensar en la implicación de cada compra, en si de verdad es algo que podamos comprar sin ninguna repercusión negativa. En el caso de responder de forma positiva todo, entonces sabremos que la compra es segura de hacer y que podemos permitírnoslo.

Una de las preguntas más importantes es aquella sobre nuestro estado emocional. Es muy común que las personas cuando se sientes tristes, aburridas o estresadas, tomen sus billeteras y compren cualquier persona sin pensarlo dos veces. Un estudio de 2014 publicado en la 'Revista de la Psicología del Consumidor' descubrió que comprar causa felicidad inmediata y que incluso puede tener efectos sobre la tristeza residual (persistente).

Es por ello por lo que hacernos estas seis preguntas nos permitirá desasociar esa felicidad instantánea y pensar en frío si nos conviene la compra o no. Nuestros hábitos de gasto se convierten en parte de nuestra rutina diaria, por eso es entendible que sea difícil de cambiar. Pero esta es una forma sencilla de empezar ahorrando mediante la compra consciente. Después de empezar a comprar de forma analítica y analizada, se puede pasar a otros métodos de ahorro con los que gestionar el dinero y categorizarlo de acuerdo con nuestras necesidades.