ENTREVISTA EN ONDA CERO
Inés Pineda Torra: "Todas la mujeres tendrían que revisarse el corazón"
En la sección 'Las claves de la Brújula' de Onda Cero entrevistan a la investigadora principal, distinguida del Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa, (CABIMER), Inés Pineda Torra, que investiga para perfilar de una manera más eficaz el riesgo cardiovascular en mujeres.
El domingo 29 de septiembre se celebra el día mundial del corazón. Cada año mueren en el mundo 17,9 millones de personas a causa de la enfermedad cardiovascular, que incluye las enfermedades cardiacas y cerebrovasculares.
Hoy en día, esta enfermedad es la primera causa de muerte natural en todo el planeta y se estima que la cifra ascenderá a 23 millones en el año 2030.
En España, las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de mortalidad femenina y la segunda en hombres, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística. Diversos estudios indican que, además, en estas patologías rige un sesgo de edad –a más años, mayor prevalencia– y de género –afectan tres veces más al hombre que a la mujer–. Pero los expertos advierten de que en ningún caso son dolencias exclusivas de la población masculina de más 60 años, como se suele creer. Afecta y cada vez más a las mujeres.
Y para analizar este hecho, AXA Research Fund que apoya la investigación científica en todo el mundo, ha otorgado una Cátedra de un millón de euros a nuestra invitada Inés Pineda, con el objetivo de perfilar de una manera más eficaz el riesgo cardiovascular en mujeres, que aumenta con la menopausia, y definir cómo influyen los cambios hormonales y de grasas circulantes que aparecen con la menopausia en los mecanismos moleculares que explican ese riesgo. Lo que permitirá establecer si existen diferencias con los hombres en los procesos clave identificados.
Para hablar de todas estas cuestiones está con nosotros Inés Pineda Torra, Investigadora Principal distinguida del Centro Andaluz de Biología Molecular y Medicina Regenerativa.
Pineda declara que están "muy contentos en CABIMER" por esta cátedra y "con mucho ánimo y muchas expectativas de que estos estudios nos ayuden avanzar un poco más en este tipo de cuestiones que están un poco olvidadas, a veces".
Estas enfermedades "muchas veces están olvidadas por las propias mujeres. Hubo una encuesta de la Sociedad Española del Corazón, un 73% de las mujeres piensa que la primera causa de mortalidad es el cáncer, y no lo es. Nosotras misma no somos conscientes de este tipo de dolencias y cómo pueden influir en nuestra vida, a pesar de ser mujeres y a pesar de que durante mucho tiempo estamos bastantes protegidas. Hay cambios hormonales y en las grasas que hacen que ya no estemos tan protegidas".
La investigadora considera que "cada vez hay más conciencia, pero todavía en muchos estudios y entre clínicos, en enfermedades cardiovasculares y metabólicas se suelen emplear, o bien modelos animales macho, o bien cortes de pacientes con una gran mayoría de hombres. Está cambiando por muchas razones, en parte porque algunas fundaciones o instituciones u organizaciones que financian estas investigaciones han dicho que ya basta, y que no van a financiar más estudios en los que solamente haya hombres si no se justifica el porqué, pero todavía tiene que cambiar un poquito más".
Respecto a sí sería factible en breve contar con un test molecular avanzado para las mujeres, Pineda afirma que "nos gustaría, por lo menos, mejorar los tests y las calculadores que existen actualmente. Ya hay otros equipos que están investigando esto y se están haciendo avances, pero todavía se tienen muchos datos que vienen solamente de poblaciones mayoritariamente masculinas y no conocemos suficientemente las diferencias que hay con las mujeres".
"Para nosotros sería un gran avance, por lo menos, aportar nuestro grano de arena para que en un futuro sí que lleguemos a eso. Ya simplemente que hay más conciencia, son enfermedades que son también en las mujeres y se visualice más en los medios de comunicación", señala.
Con la menopausia, aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, "hay un incremento de las grasas en el abdomen, ya se ha visto que son las grasas más peligrosas. Y también hay cambios, casi un 10%, un 15% de aumento en los niveles de colesterol malo y de otras grasas también, y eso si no se trata bien puede llegar a tener bastantes complicaciones. Además, ya con la edad las mujeres desarrollan más hipertensión, entonces empiezan a tener más factores de riesgo cardiovascular y de hecho se empiezan a equiparar ya a los hombres. Hay unos diez años de franja de diferencia, pero luego al final, desgraciadamente, las estadísticas nos dicen que las mujeres alcanzamos los niveles de riesgo que tienen los hombres".
En cuanto a los síntomas de un ataque al corazón, "parece que en los hombres hay un claro síntoma que es un dolor intenso en el pecho y que ramifica al brazo izquierdo y en las mujeres ese síntoma también se da, pero también se pueden dar otros como malestar general, vómitos, desmayos, y parece que los síntomas pueden ser un poco más variados. Incluso con eso se necesitan más investigaciones, tampoco hay mucho estudios que han visto esto y hay algunas cuestiones contradictorias", aclara.
Las mujeres con la menopausia, "que es a partir de los 50 años", según las guías de prevención cardiovascular "tanto americanas, como las europeas y también la Sociedad Española del Corazón, dicen que todas la mujeres tendrían que revisarse el corazón y tener un seguimiento bastante individualizado. Intentar controlar los niveles de hipertensión, los niveles de colesterol, la obesidad y el sedentarismo, promover unos cambios en el estilo de vida, nutricionales y de ejercicio físico, pero los chequeos al corazón son muy importantes en esta época. A nivel de atención primaria, controlar este tipo de factores de riesgo que pueden llegar a ser bastante importantes a la hora de desarrollar un evento cardiovascular".
Las administraciones en ocasiones entorpecen la labor de investigación como la que Pineda realiza, "a veces, en España, los sistemas de financiación conllevan muchísima burocracia un poco desesperante y eso, desde luego, no facilita la investigación de ninguna manera. Las fechas de financiación van cambiando de un año a otro, políticas de financiación muy variables, relativamente muy poca financiación con el resto de nuestros vecinos europeos. Entonces es muy difícil ser competitivos con estas condiciones. A mí me gustaría que en algún momento vivieran nuestro día a día y vieran la cantidad de papeleos y de cosas que tenemos que hacer que nos quitan muchísimo tiempo para lo que realmente valemos que es para hacer investigación", sostiene.