ESPAÑA, 5ª EN ESPERANZA DE VIDA A NIVEL MUNDIAL
Los españoles vivimos 83 años de media, diez más que la población mundial
España es uno de los países del mundo con mayor esperanza de vida tanto en hombres como en mujeres, de media vivimos 10 años más de media que la población mundial, según el último estudio publicado por la revista “The Lancet”. La obesidad, la violencia y las enfermedades mentales se mantienen como grandes problemas de salud que, no han evitado que aumente la esperanza de vida a nivel global.
En España, la longevidad para una persona que ha nacido en 2016 se sitúa en 75,3 años para las mujeres y 69,8 para los hombres. Gracias a estos datos, España está entre los cinco primeros puestos a nivel mundial. Los hombres que han nacido en 2016, tendrán una esperanza de vida de hasta 2,7 años más que los nacidos en 2006. En el caso de las mujeres vivirán 1,6 años.
Actualmente, las mujeres más longevas viven en Japón (86,9), Singapur (86,1), Andorra (85,8), España (85,6) y Australia (84,6). En el caso de los hombres, es Singapur donde más viven (81,3) seguido de Japón (80,8), Islandia (80,6), Australia (80,5) y España empatada con Luxemburgo (80,3).
El trabajo ha analizado la esperanza de vida saludable, en España está en 74 años para las mujeres y 71,2 para los hombres. El investigador Joán Soriano ha destacado que “es un dato impresionante” pero que “no hay que ser complacientes” ya que el Azheimer y los dolores de espalda o cuello impiden cada vez más llevar una vida sana.
Las cinco principales causas de muerte prematura en España son la cardiopatía isquémica, el Alzheimer, el cáncer de pulmón, los accidentes cerebrovasculares y la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica). El dolor de espalda, la migraña y la pérdida de audición son los principales factores que desarrollan futuras discapacidades.
Por otro lado, por primera vez en 2016 han muerto menos de 5 millones de niños menores de 5 años, siendo 11 millones los que fallecieron en 1990. Esto se debe al aumento del nivel educativo de las madres, el aumento de los ingresos per cápita, la disminución de los niveles de fertilidad, el aumento de los programas de vacunación, la distribución masiva de mosquiteras, el agua potable y los programas que promueven el desarrollo de la salud. Estos datos son buenos pero es necesario tomar medidas contra la obesidad, la violencia y los trastornos mentales.
Por último, es necesario destacar que, han caído un 30% grandes enfermedades como son las infecciones respiratorias, la diarrea, el parto prematuro, el sida o la malaria.