MÁS DE 1.000 DONANTES
La iniciativa solidaria ‘Amigos del CNIO’ promueve la investigación sobre nanopartículas y división celular
'Amigos del CNIO', iniciativa solidaria que buscar sumar esfuerzos para la investigación del cáncer, cuenta con más de 1.000 donantes y un programa de becas y contratos para la atracción del talento investigador, a los que se suman ahora dos nuevos contratos postdoctorales.
Los nuevos receptores de los contratos postdoctorales son Carolina Maestre, que investigará los mecanismos de la división celular en los tumores, y Sebastián Thompson que lo hará en el campo de la nanotecnología y su aplicación para el tratamiento de la enfermedad.
Carolina Maestre, licenciada en Biología y Bioquímica, fue Premio Extraordinario de Doctorado en la Universidad de Salamanca en 2009 gracias a su investigación sobre los mecanismos de re-activación aberrante del ciclo celular responsables de la pérdida de neuronas en algunas enfermedades neurodegenerativas o tras un ictus.
En 2011 se incorporó al Wolfson Institute for Biomedical Research (University College London) donde estudió la regulación del metabolismo energético durante la entrada en el ciclo celular en cáncer. Desde 2014 forma parte del Grupo de División Celular y Cáncer del CNIO, liderado por Marcos Malumbres.
Thompson es licenciado en Química por la Universidad de Buenos Aires. Realizó su doctorado en la Universidad de la Ciudad de New York (CUNY) en terapias anticancerígenas que usan luz y nanotecnología. Tras su paso por el Instituto de Ciencias Fotónicas de Barcelona y la Universidad de Northwestern en Chicago, llegó al CNIO en febrero de 2017.
Su trabajo se centra en las nanopartículas, especialmente en resolver algunas dificultades asociadas a su uso. “En los últimos años –explica–, el mayor problema es la localización de los compuestos químicos de tamaño nano (nanopartículas) en el tumor (esta es la razón por la cual la terapias nanotecnológicas no se aplican en carcinomas humanos todavía). Estamos llegando al tumor solamente con el 1% de lo que inyectamos. El resto se lo lleva el hígado u otros órganos sanos”.
Gracias a Amigos CNIO, seguirá trabajando “en encontrar la forma de llevar mayor cantidad de estas nanopartículas a los tumores. Encontrar la forma de dirigir más eficientemente las nanopartículas hacia los tumores nos abre el camino a poder aplicar los últimos avances de la nanotecnología al tratamiento del cáncer”.
La iniciativa 'Amigos del CNIO' surgió a finales de 2014 con el objetivo de recaudar fondos para financiar diferentes proyectos de investigación desarrollados en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas y, de este modo, continuar con los esfuerzos para mejorar el diagnóstico y tratamiento del cáncer. Hasta la fecha, cuenta con más de 1.000 donantes cuya generosidad ha permitido la puesta en marcha de cinco becas postdoctorales para el estudio de esta enfermedad.