CIENCIA APARTE
La curiosa relación entre el plastidecor de color 'carne' y tu base de maquillaje
"Los formuladores de bases de maquillaje aplican el modelo de síntesis sustractiva del color, tal y como hacen los artistas. Gracias a la sofisticación del manejo del color podemos pintar y maquillar la piel con los todos los auténticos colores carne"...
En clase todos teníamos el estuche con la docena de ceras Plastidecor. El color carne estaba colocado entre el crayón naranja y el amarillo, pero bien podría estar al lado del de color rosa. Esto es así porque el color carne se obtiene mezclando los pigmentos rojo, blanco y amarillo. Me servía para hacer autorretratos, puesto que tengo la piel pálida de los rubios, la del color 'carne'; pero no me servía para retratar a Rubén, que era de color marrón.
El crayón marrón se fabrica con un pigmento más que el de color carne. Además de rojo, blanco y amarillo, el marrón contiene pigmento de color negro. El mecanismo por el cual la mezcla de pigmentos produce todo un espectro de colores se describe por medio del "modelo de síntesis sustractiva de color". Se llama "sustractiva" porque el color que se observa es el de la luz que no se absorbe, la que se refleja. Así, una naranja se ve de color naranja no porque emita luz naranja (de lo contrario sería visible en la oscuridad) sino porque absorbe toda la luz excepto la de color naranja, que es la que alcanza nuestro ojos.
Al mezclar diferentes pigmentos para fabricar un crayón o cualquier otra pintura, el color final es el resultado de la mezcla sustractiva. Si se mezclan en las proporciones adecuadas los colores primarios, el resultado será una pintura de color negro, que lo absorbe todo y no refleja nada. Con los pigmentos ocurre lo contrario que con los colores luz, que al mezclarlos se rigen por el "modelo de síntesis aditiva", puesto que la mezcla de los colores primarios de la luz dan como resultado la luz blanca.
Durante la educación primaria se aprende que, además de la pintura blanca y negra, solo hacen falta botes de pintura de color azul, rojo y amarillo para hacer mezclas con las que obtener cualquier color. Esos tres colores son los primarios del modelo tradicional de coloración, que es el que han empleado la mayoría de los artistas a lo largo de la historia.
Los plastidecor son pinturas que se fabrican mezclando diferentes pigmentos con un aglutinante de parafina. La parafina es un compuesto orgánico, basado en la química del carbono, y se compone de una mezcla de hidrocarburos alcanos de entre veinte y cuarenta átomos de carbono unidos uno tras otro, como un collar a escala atómica.
Se identificó por primera vez en 1830 como un derivado del petróleo, aunque también se puede obtener del carbón y de los esquistos bituminosos. El nombre deriva del latín parum 'apenas', más affinis, aquí utilizado con el significado de 'falta de afinidad' o 'falta de reactividad'. Efectivamente la parafina es una sustancia bastante inerte, que apenas reacciona con nada.
Coloquialmente estos crayones se llaman "ceras de parafina" para diferenciarlos de las ceras convencionales, que son crayones más cremosos, cubrientes, que permiten la mezcla y el sobrepintado. La pintura que se fabrica mezclando pigmentos con cera como aglutinante se conoce como encáustica, que es una de las técnicas pictóricas más antiguas. En la actualidad se siguen usando ceras tanto para fabricar pinturas como para fabricar cosméticos, entre ellos los pintalabios.
¿Qué tiene que ver el maquillaje con las ceras de pintar?
Las bases de maquillaje se fabrican con la misma mezcla de pigmentos que el plastidecor de color carne y el plastidecor de color marrón. La formulación del color del color del maquillaje se fundamenta en las mismas teorías del color que emplean los artistas.
Para identificar los pigmentos en un maquillaje hay que fijarse en la lista de ingredientes. En todos ellos hay un grupo de compuestos que figuran con las letras CI seguidas de unos números. Esos números se corresponden con el "Índice Internacional del Color" –o Colour Index, de ahí las siglas CI–, que es el sistema de referencia que se usa en la industria química para identificar cuál es la composición de cada colorante o pigmento.
Este sistema se usa tanto en cosmética como en la industria textil. Los dos primeros dígitos indican qué categoría de compuesto químico es. Así los que empiezan por 77 son pigmentos minerales, los que empiezan por 74 son ftalocianinas, por 47 son quinolinas, por 46 son acridinas, etc. Sobra decir que todos los pigmentos empleados para formular cosméticos cumplen con los más estrictos requisitos de seguridad, así que, que nadie asuste porque los químicos demos un nombre preciso a cada una de las sustancias que componen el mundo.
Los diferentes tonos del maquillaje se obtienen mezclando varios pigmentos en diferente proporción. Los más comunes son estos cinco: blanco CI 77891, que es un pigmento mineral de dióxido de titanio; rojo CI 77491, que es óxido de hierro (III); amarillo CI 77492, que es óxido de hierro (II); negro CI 77499, que es óxido ferroso-férrico (óxido de hierro (II, III)); y azul CI 77007, un aluminosilicato conocido como azul ultramar, uno de los pigmentos más codiciados de la historia del arte. Al ser el azul el color complementario del naranja, sirve para contrarrestar las rojeces de la piel.
Los formuladores de bases de maquillaje aplican el modelo de síntesis sustractiva del color, tal y como hacen los artistas. Así, al mezclar rojo con amarillo se obtiene naranja, o amarillo con azul da verde. Y al añadir negro o blanco a la mezcla se obtienen los diferentes valores de la tonalidad. Gracias a la sofisticación del manejo del color podemos pintar y maquillar la piel con los todos los auténticos colores carne.