Rhys Millen, dos veces ganador, será su piloto.
El próximo 24 de junio, Bentley tratará de batir el actual récord del SUV más rápido en la Subida a Pikes Peak, el cual se encuentra en manos del Range Rover Sport
El Grupo Volkswagen estará representado por partida doble en la próxima edición de la Subida a Pikes Peak. Con la carrera acercándose a su centenario, el gigante automovilístico se ha asomado a los 4.330 metros a los que se sitúa la cima de la icónica carrera norteamericana para enfrentarse con dos proyectos muy distintos a la misma. Mientras que Volkswagen tratará de batir el tiempo entre los eléctricos con un prototipo alimentado por baterías construido por el equipo de Hannover, Bentley tratará de alcanzar un récord para vehículos de producción que actualmente está en manos de Range Rover.
Será el próximo domingo 24 de junio cuando Rhys Millen, ganador en dos ocasiones de la “Carrera hacia las nubes”, trate de asaltar el récord que ostenta desde 2013 el Range Rover Sport como SUV de producción más rápido en la prueba que se celebra en Colorado. El neozelandés de 45 años, hijos del mítico Rod Millen, ganador en cinco ocasiones y recordado por sus duelos con ‘Monster’ Tajima, deberá superar el reto de completar los casi 20 kilómetros y 156 curvas de los que se compone el itinerario en menos de 12 minutos y 35, 61 segundos,
Para dicho menester, Rhys contará con un Bentley Bentayga especialmente preparado por Bentley Motorsport en Crewe con los elementos de seguridad básicos tales como lo nuevos asientos de tipo baquet, sistema de extinción o barras antivuelco. En lo que respecta al resto, la normativa de la categoría de producción obliga a mantener prácticamente todo de serie, entre otras cosas el motor, que seguirá siendo el W12 con 600 CV de potencia 900 Nm de par máximo con el que se comercializa en la actualidad el todocamino británico.
Los neumáticos en esta ocasión serán proporcionados por Pirelli, de nueva una versión que no será derivada de la competición, mientras que el sistema de escape será de Akrapovic, especialista que también fue el encargado de realizar el de la versión de carreras del Bentley Continental. El resto de elementos se mantienen intactos respecto a la versión de serie, incluida la suspensión neumática con control activo anti-vuelco (Bentley Dinamic Ride).
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