Caos y sorpresas en el inicio de las 24 Horas de Le Mans 2023

Se esperaba una edición centenario de las 24 Horas de Le Mans magnifica, a la altura de la época dorada de la disciplina, sin embargo, las 10 primeras horas de carrera han superado ampliamente las expectativas, con una preciosa lucha entre prácticamente todos los prototipos pertenecientes a la categoría Hypercar, aderezada en este caso por la aparición de dos tormentas puntuales, una a media tarde, otra con el inicio de la noche, que terminarían por alterar por completo el orden natural.

Aunque el Balance of Performance que sumaba 37 kilogramos a los dos Toyota GR010 Hybrid LMH frenaba evidentemente las prestaciones de los vehículos nipones, algo que quedó reflejado con la línea que había conseguido monopolizar Ferrrari tras la Hyperpole del jueves, se esperaba que los defensores del cetro intercontinental pudieran plantar cara con su ritmo de carrera y una gestión de gomas que sobre el papel era mucho mejor que la de todos sus rivales.

Precisamente los Toyota comenzarían apretando a los Ferrari desde la primera curva, a pesar de que hubo algún que otro momento de tensión al ver al primer de los Porsche bloquear en frenada en la llegada al puente Dunlop. Se superaba esa primera vuelta sin incidentes, con los coches de la marca japonesa poniéndose al frente desde muy pronto y buscando marcar esas primeras vueltas un ritmo inalcanzable. Sin embargo, la aparición del primer Safety Car (con la nueva normativa) tras el accidente de Jack Aitken al volante del Cadillac #311 en la primera entrada a la recta de Mulsanne, hizo que las posiciones se volvieran a estabilizar y se neutralizarán las diferencias.

A partir de aquí, la carrera se iba a volver completamente loca, con Toyota pagando de forma muy temprana el haber montado el compuesto blando para arrancar la prueba que le dio esa velocidad inicial. Los coches paraban en boxes antes de que cuando nos acercábamos a la tercera hora, la primera de las tormentas hizo aparición. Desde el muro le decían a uno de los pilotos Porsche que sólo le quedaba aguantar, que serían unos minutos complicados, pero que se iba a perder más entrando a poner las gomas de mojado que siguiendo en pista. No sería así.

Los equipos pararon y la carrera quedaba completamente barajada, incluso con protagonismo por parte de coches que no se esperaba que estuvieran en la lucha, especialmente en el caso del Peugeot 9X8 LMH. Fueron momentos de tensión esas primeras horas de carrera, con los participantes especialmente fogosos y con la aparición del aquaplaning que a punto estuvieron de cobrarse como victimas a uno de los Cadillac y a otro de los Glickenhaus, completamente pasajeros en unas condiciones de mucha agua. Las horas siguieron avanzando y la aparición por segunda vez de la lluvia también derivó en momentos de mucho nerviosismo, pero sería con el asfalto ya secándose cuando se daría el primero de los abandonos entre los Hypercars.

Después de que el Porsche de JOTA Hertz, uno de los privados presentes aquí, con un Porsche 963 LMDh que estrenaron en Spa-Francorchamps, llegara a liderar, un gran golpee contras las protecciones le dejó fuera de la lucha, mientras que dos de las unidades oficiales tuvieran un tempranero pinchazo y una penalización de Drive-Trough. Quedaba el Porsche #75 en liza, hasta el momento que, en la octava hora, el coche se quedaba detenido en Tertre Rouge y posteriormente, aunque consiguió llegar al box, se confirmaba su retirada por problemas de presión de combustible.

El segundo abandono sería el del Toyota GR010 Hybrid LMH pilotado por Kamui Kobayashi, con el piloto japonés siendo alcanzado por uno de los competidores de GTE-Am justo antes de llegar a una zona con doble bandera amarilla. La unidad #7 se quedaba fuera de carrera al no poder volver a poner en marcha Kamui, jefe del equipo, de nuevo el vehículo. Con diez horas ya completadas, el Peugeot #94 está al frente de la prueba, por delante del Toyota #7, el Ferrari #51 y el Cadillac #2, con la noticia negativa para Miguel Molina de que su unidad ha tenido que pararse en boxes en torno a las 2 de la madrugada por una fuga de líquido de refrigeración. En LMP2, el equipo de Inter Europol con Albert Costa al frente está luchando por la victoria con el Team WRT con el Porsche 911 RSR GTE de Iron Dames peleando por la primera posición en GTE-Am.