El madrileño volvió a sufrir problemas de navegación y ha cedido más minutos
Mientras que Peterhansel y Al-Attiyah mantienen su batalla por la primera plaza, los vigentes ganadores del Dakar siguen sin tener una jornada tranquila.
La polémica ha llegado al Dakar para quedarse. Aunque hubo ya un pequeño anticipo con el problema de la gasolina contaminada que afectó especialmente a los competidores en motos, han sido las grandes estrellas de la categoría de coches las que en las últimas horas han criticado con dureza a los organizadores y a los comisarios encargados de las decisiones deportivas de la carrera. En cuanto a lo meramente competitivo, ha habido unos ganadores nuevos en las principales clases, con Giniel de Villiers y el español, Alex Haro, logrando el triunfo en coches, mientras que Kevin Benavides también sumaba su primer triunfo de etapa de esta edición en motos.
La quinta etapa, a disputarse entre Riyadh y Al Qaisumah con 456 kilómetros competitivos (662 km en total), ha vuelto a poner contra las cuerdas a los pilotos y participantes debido a la facilidad con la que se daban los errores a la hora de navegar entre waypoints. Con los tres primeros de la general equivocándose en algunos puntos entre los 100 primeros kilómetros del recorrido, fueron los hombres de Toyota GAZOO Racing South Africa, con el ganador del Dakar 2009 a la cabeza, los que se aprovecharon para cobrar una ventaja que posteriormente ya no sería posible de neutralizar por sus perseguidores, decantándose el triunfo en favor de Giniel y Haro, por delante de los también sudafricanos Brian Baragwanath y Taye Perry, competidores que ya consiguieron el mejor tiempo en la etapa prólogo empatados en su registro con Nasser Al-Attiyah y Mathieu Baumel.
Si Baragwanath le daba la buena noticia a los responsables de los buggies Century CR6, la mala venía de la mano de Mathieu Serradori, con una suspensión dañada cuando apenas llevaba recorridos 17 kilómetros competitivos y sabiendo que el francés se encontraba en una bonita batalla con Sébastien Loeb, Jakub Przygonski y Henk Lategan por la cuarta plaza, todos ellos en prácticamente media docena de minutos. Tampoco Lategan tendría buenas nuevas para Toyota GAZOO Racing South Africa en el día de hoy. Un fuerte accidente muy cerca de donde se paraba Serradori dejaba fuera de carrera al dos veces Campeón Sudafricano de Rallies Cross-Country, afectado además por una fractura de clavícula.
En cuanto a los candidatos a la victoria final, Stéphane Peterhansel le aventajaba a Nasser Al-Attiyah en 2 minutos y 13 segundos, algo que le permite llevar la diferencia en la general a los 6 minutos y 11 segundos a pesar de que Monsieur Dakar sigue sin conseguir su tan ansiada victoria de etapa. Carlos Sainz y Lucas Cruz, que se perdían de camino al WP1, tuvieron que completar el resto de la jornada al ataque, logrando contener los daños al llegar a la meta con 13 minutos y 56 segundos de desventaja respecto a Peterhansel, mientras que la diferencia con Al-Attiyah era de apenas 10:41. Sin embargo, la general refleja una realidad más cruda, ya que los españoles, ganadores de las ediciones de 2010, 2018 y 2020, se encuentran ya a 48 minutos y 13 segundos del líder.
Tampoco fue un buen día para Sébastien Loeb y Daniel Elena, que se dejaban otros 50 minutos en la etapa después de perderse dos veces y pinchar en hasta tres ocasiones por tercer día en menos de una semana. Los nueve veces Campeones del WRC comenzaban la etapa sabedores de que recaía sobre ellos cinco minutos de penalización tras superar la velocidad límite en uno de los tramos cronometrados. Loeb se defendió, asegurando que el GPS no funcionó correctamente y que no saltó la alerta sonora al entrar en estas zonas no señaladas en las que los competidores tienen que levantar el pie. No hubo misericordia. Los comisarios no le levantaron la sanción y Sébastien se despachó a gusto hablando de la “incompetencia” de los comisarios.
También Carlos Sainz y Lucas Cruz mostraban su enfado en las últimas horas por el recorrido diseñado por ASO para esta edición 2021 del Rally Dakar. El madrileño apunta a que no le gusta la tendencia que está tomando la carrera, perdiendo esa filosofía de aventura para convertirse en lo que Sainz ha dicho que es una Gymkhana: “Es una lotería, se trata de encontrar un pequeño resquicio... no es conducir, estoy desmoralizado y disgustado. Todo el mundo se pierde, todos buscan los WayPoints... esto no es lo que me gusta. Esto no es el Dakar”. A las contundentes palabras de Carlos se sumaban las de su compañero, el líder de la carrera y 13 veces ganador del Dakar, Peterhansel, el cual apuntaba a que se estaba convirtiendo en un tipo de itinerario altamente peligroso ya que a pesar las medidas implementadas por ASO y los cambios en las zonas visitadas, “las velocidades promedio siguen siendo demasiado altas”.
En cuanto al resto de categorías, además de la victoria de etapa y una caída, Kevin Benavides ha sumado a su resumen de hoy el haber conseguido alcanzar el liderato de la carrera, relegando a Xavier de Soultrait a la segunda plaza a 2:31 del argentino de Honda, mientras que Nacho Cornejo y Toby Price están a menos de cuatro minutos. Espectacular etapa del salmantino de Sherco, Lorenzo Santolino, que terminaba cuarto en la clasificación de la jornada y se encarama a la sexta plaza de la general como primer español, a nueve minutos y medio del hermano mayor de los Benavides, mientras que Barreda cae a la novena, cinco minutos por detrás de Lorenzo. Por su parte, Cristina Gutiérrez se mantiene segunda entre los T3, aunque más lejos de su compañero de equipo, el estadounidense de 18 años, Seth Quintero.