El cántabro lidera por apenas un segundo de ventaja la última cita del año
Incluido como última opción para el alterado calendario 2020, el Rally de Monza está siendo todo un quebradero de cabeza por la lluvia, el barro y la nieve
La última cita del Mundial de Rallies no ha podido comenzar con una condiciones más difíciles y exigentes. Monza, el circuito italiano que solemos relacionar con la Fórmula 1, acoge este fin de semana la séptima fecha de este WRC 2020 con tantos cambios provocados por la pandemia, transformando lo que se conoce tradicionalmente como “Monza Rally Show” en una cita mundialista con más de 241 kilómetros cronometrados y la visita a las montañas cercanas al Lago de Como durante la etapa programada para el sábado.
Con la disputa de la misma en pleno mes de diciembre, era evidente que uno de los factores que podía acompañar a los pilotos este fin de semana era la lluvia, sin embargo, en esta ocasión hasta la nieve ha hecho acto de aparición, algo que ha obligado a la FIA a corregir sucesivamente la cantidad de neumáticos que le iban a permitir utilizar a los competidores, garantizando hasta 14 ruedas del compuesto de lluvia y 10 del neumático de invierno sin clavos, cuando inicialmente tan sólo iban a permitir 12 del primero y ocho del segundo.
Parecía que los tramos a temer podían ser los de la etapa del sábado, con las hasta 15 horquillas en subida de forma consecutiva del tramo de Selvino que recordarán seguramente a las que se encuentran habitualmente los pilotos en enero cuando se encuentran disputando el Rally de Montecarlo. La situación se ha dado la vuelta y tras las intensas lluvias de la madrugada, la jornada del viernes se ha celebrado en unas condiciones completamente dantescas de lluvia y barro, con la niebla y finalmente la oscuridad de la noche como peligrosas aliadas de una prueba que de Show tiene bien poco.
En estas condiciones, ha sido uno de los hombres con más experiencia en el Monza Rally Show el que ha marcado el ritmo. Dani Sordo y Carlos del Barrio han terminado el día líderes con apenas un segundo de ventaja sobre el piloto finlandés de M-Sport, Esapekka Lappi, después de que el finlandés tuviera un arranque de genialidad al montar para la segunda especial del día un juego de neumáticos de nieve sin clavos que le daban de largo el mejor tiempo en esa especial y que además le aupaban hasta el liderato, arrebatándole inicialmente al cántabro la posición, que había comenzado el día con scratch.
Al piloto de Hyundai le valía con ser el más rápido al inicio y al final de la etapa para acostarse líder y soñar con la que puede ser su victoria más dulce en Monza, después de haber conseguido dos previamente en el Rally Show, frente a pilotos de la talla internacional de Valentino Rossi o el expiloto de resistencia, Rinaldo Capello. Por delante todavía una decena de especiales y la necesidad de defender ese segundo de ventaja para conseguir la que puede ser su segunda victoria mundialista del año después de la conseguida hace un mes precisamente en el Rally de Cerdeña, cerrando el que sería el mejor año de la carrera deportiva de Sordo en las series.
El resultado de Dani será además vital para Hyundai, la cual llegaba con únicamente siete puntos de ventaja sobre Toyota en el apartado de constructores, con el disgusto para los coreanos de ver abandonar a Thierry Neuville después de dañar la suspensión delantera en el TC4 al cortar demasiado una chicane y tocarse con una de las protecciones de hormigón colocadas por los organizadores para que los pilotos no atajaran demasiado. El belga trataría de seguir y completar el tramo, pero al cruzar una de las acumulaciones de agua y hacerlo a una velocidad reducida, el líquido elemento terminaría por para el motor del i20 Coupé WRC para no volver a arrancar.
Neuville se reenganchará mañana si el propulsor no tiene daños graves, pero se ha despedido por completo de sus opciones de salir campeón, ya que llegaba a la última cita del año con 24 puntos de desventaja respecto a Elfyn Evans. En el caso de Hyundai, deberá confiar en Sordo y Ott Tänak para que consigan los puntos suficientes para asegurarse su segundo título de fabricantes consecutivo, algo que con la primera posición provisional y la quinta del estonio actualmente se daría de terminar así la carrera.
Completando el podio Sébastien Ogier, que está marcado de cerca por un Evans que sabe que con terminar justo detrás de su compañero se asegurará ser Campeón del Mundo por primera vez sin importar los puntos extra de la Power Stage del domingo. Actualmente son 14 puntos los que separan a ambos, por lo que Ogier necesita prácticamente un abandono de su compañero de equipo y sumar los puntos de la tercera posición. Tänak por su parte, con 28 puntos de desventaja necesitaría ganar y sumar al menos tres puntos en la Power para al menos igualar la cifra de Elfyn.
En el resto de categorías, Pontus Tidemand, Andreas Mikkelsen y Tom Kristenson completan el dominio escandinavo en el Rally de Monza dentro del WRC2, WRC3 y el Mundial Júnior respectivamente.