Elfyn Evans responde y Toyota se acerca a su cuarto triunfo en Finlandia

Poco queda de la clasificación con la que terminaba la primera etapa del Rally de Finlandia. Ni el dominio por parte de los Hyundai, ni el recorte de puntos de Thierry Neuville a Sébastien Ogier y mucho menos esa estadística de ningún abandono entre los pilotos de la categoría absoluta. Llamada a ser determinante al suponer más de la mitad de la distancia competitiva de este fin de semana, la jornada del sábado ha supuesto todo un vuelco a la clasificación general.

Era Elfyn Evans el encargado de liderar esa revolución que ya iniciara en la última especial del viernes. El galés se ponía en modo imbatible y tras conseguir cuatro mejores tiempos consecutivos durante la mañana, llegaba a la asistencia del mediodía con un liderato claro sobre los dos pilotos de Hyundai oficiales. Poco o nada podían hacer Craig Breen y Ott Tänak para detener el avance del piloto de Toyota, un paso más cerca de alargar la racha de triunfos de la marca nipona en Finlandia una edición más, lo que haría que precisamente el Yaris WRC terminara su etapa competitiva en el Mundial sin conocer la ‘derrota’ sobre las pistas del 1.000 Lagos.

Habría una tímida respuesta por parte del Campeón del Mundo de 2019, consiguiendo encadenar tres scratchs consecutivos en el bucle vespertino, cuando el agarre había mejorado significativamente, sin embargo, Evans daría respuesta prácticamente de forma inmediata para mantener su renta por encima de los nueve segundos cuando todavía faltan por completar las cuatro especiales de la etapa del domingo, apenas 45 kilómetros cronometrados entre ellas. Peor le iban las cosas a Craig Breen, el cual estuvo en condiciones de pelear por su primer triunfo en el WRC durante parte de la primera etapa, hasta que se ha descolgado ya durante el sábado.

Un pequeño toque con una bala de paja en el primer tramo de la tarde le dejaría dañada parte de la aerodinámica del frontal lo que le llevaba a perder parte de esa estabilidad necesaria para afrontar los rasantes de alta velocidad de Finlandia. Cayendo hasta la tercera posición a casi 20 segundos de Evans, el irlandés parece que puede estar ante sus últimos kilómetros con Hyundai quedándose una vez más a las puertas de estrenar su palmarés.

Cuarto y quinto terminaban los pilotos de Toyota, Esapekka Lappi y Sébastien Ogier, ambos prácticamente en tierra de nadie y a la espera de que algunos de los pilotos de cabeza puedan sufrir algún percance que les lleve a ceder sus plazas en el podio. Hasta entonces, cabe destacar los abandonos de dos de los contendientes por el título, Kalle Rovanperä y Thierry Neuville, a los que se ha sumado también la retirada de Takamoto Katsuta, en la primera especial de la mañana y tras arrancar una rueda al golpear un árbol.

Rovanperä también diría adiós a la prueba de casa por accidente, después de perder el control del Yaris WRC en una zona de enlazadas muy rápidas. El joven piloto de Toyota reconocía que había tratado de salvar el accidente forzando el trompo, sin embargo, el impacto contra un montículo de tierra situado en uno de los laterales le llevó a tener que abandonar. En cuanto a Neuville, una fuerte compresión en el penúltimo tramo del día le arrancaba la parrilla de luces y además le provocaba una fuga de agua que le obligaría a detenerse y despedirse prácticamente de toda opción de frenar el avance de Sébastien Ogier hacia su octavo título Mundial.

Cerraban la clasificación entre los World Rally Cars los dos pilotos de M-Sport, ajenos a la lucha entre Hyundai y Toyota y con Greensmith haciendo valer su ritmo frente a la inexperiencia de Adrien Fourmaux. En WRC2 y WRC3 es por el momento pleno finlandés, con Teemu Suninen en la primera plaza con el Volkswagen Polo GTI R5 de Printsport y Emil Lindholm haciendo lo propio en la tercera división en la que también participa el español Pepe López, actualmente sexto.