Mientras que Renault busca dar caza a Mercedes-Benz con la mejora de la eficiencia térmica de su motor de combustión, la
Scuderia Ferrari trabaja ya en un nuevo monoplaza para 2018 que según ha deslizado la prensa italiana rompería con el concepto que hemos visto durante la pasada campaña. Después de que Sebastian Vettel plantara cara al ahora tetracampeón, Lewis Hamilton, durante gran parte de
la temporada con el SF70-H, el equipo italiano ha apostado por aumentar la distancia entre ejes de su coche para 2018. Recordemos que no habrá grandes modificaciones en el
reglamento técnico respecto a 2017 más allá del peso extra que supondrá la introducción del Halo y las consideraciones aerodinámicas que deberán hacerse con su presencia. Se busca de esta forma acabar con una sequía que ya dura una década después
del título conseguido en 2007 por Kimi Räikkönen en aquel desquiciante Gran Premio de Brasil. Si el cambio de normativa de la pasada temporada le permitió recortar rápidamente la brecha que mantenían las flecas de plata, los de Maranello están obligados a trabajar en otras alternativas para terminar de dar ese paso que les permita situarse por delante de los alemanes. Según
'La Gazzetta dello Sport', Ferrari aumentará la distancia entre ejes en su nuevo monoplaza de 2018,
el cual será presentado el próximo 22 de febrero, en la previa del inicio de los test de pretemporada que se desarrollarán este año de forma integra de nuevo en el Circuit de Barcelona-Catalunya. Estas modificaciones
buscarán una mejora aerodinámica que se traduzca especialmente en una mayor efectividad en curva rápida, además de ganar en estabilidad gracias a un coche más largo que el anterior (concretamente seis centímetros) y con mayor aplomo.
Recordemos que, durante 2017, Sebastian Vettel y el Ferrari rindieron
a gran nivel en trazados tortuosos como Hungría, Mónaco o Singapur, mientras que languidecieron en otros circuitos en los que se impusieron el motor y el paso por curva, especialmente en las de alta velocidad. Tras haber superado los obligatorios
Crash Test de la FIA, las simulaciones que se están llevando a cabo en el cuartel general de los italianos parecen ser más que positivas. Sin duda Ferrari llegará en poco más de un mes a los test invernales con la vitola de favorita junto a Mercedes AMG F1, mientras que se espera que
Red Bull Racing termine de dar el salto definitivo que le permita estar de nuevo en la lucha por las victorias regularmente. Así al menos lo ha destacado Toto Wolff a finales de 2017, el cual no espera que la Scuderia repita la debacle sufrida en septiembre y octubre que les terminó por llevar a perder el tren de ambos títulos.