UNA REVOLUCIÓN RADICAL
Los mandatarios de la F1 están estudiando una renovación radical del formato de las carreras al sprint, que no están convenciendo ni a pilotos ni aficionados.
En el GP de Estados Unidos se volvió a vivir un fin de semana con formato al Sprint. Un formato que no convence a los pilotos por la complejidad para configurar bien el monoplaza y la gestión de los neumáticos tanto dentro como fuera de la pista. Tampoco parece gustar a los aficionados, quienes manifiestan un cambio para que las carreras no se conviertan en un completo aburrimiento.
Las carreras al Sprint nos acompañan desde 2021 en la Fórmula 1. El primer gran premio donde se vivió este formato fue en Gran Bretaña. Ese mismo año, se disputaron otras dos carreras con este tipo de formato. Un formato que se mantuvo en 2022, con otros tres grandes premios, y que se multiplicó para esta temporada en la que viviremos hasta seis sprints.
¿En qué consiste el formato Sprint? Los fines de semana con este tipo de formato cuentan únicamente con una sesión de entrenamientos libres para configurar y optimizar los reglajes de los monoplazas. El mismo viernes, en lo que sería los Libres 2, tiene lugar la clasificación para la carrera del domingo. El sábado, por su parte, cuenta con la Sprint Shootout, una sesión que define las posiciones de salida para la carrera al Sprint que se vivirá ese mismo día.
Este formato consiste en una carrera reducida donde se recorren unos 100 kilómetros y donde los coches no deben pasar por boxes para cambiar neumáticos. Las Sprint Races también otorgan puntos a los pilotos y equipos de cara a sus respectivos campeonatos. Los ocho primeros pilotos que crucen la meta obtendrán puntos y quedan repartidos de la siguiente manera:
A largo plazo, la Fórmula 1 está comprometida a continuar con los fines de semana al Sprint como parte del campeonato. Sin embargo, para mantener el interés en este tipo de grandes premios, los máximos mandatarios se han planteado una gran revolución con ideas radicales.
Una de estas ideas, según ha podido conocer Motorsport.com, es hacer el formato con parrilla invertida, donde los 10 primeros o incluso toda la parrilla barajarían sus posiciones de atrás hacia delante. Esto podría dejarnos a todo un Max Verstappen saliendo último y teniendo que remontar en pocas vueltas para acabar en zona de puntos.
No obstante, esta no es la única idea que se han planteado para conseguir atraer la atención de los aficionados. Otra propuesta es la de realizar un campeonato de F1 Sprint independiente, de manera que los puntos obtenidos en sábado no contarían para el mundial de pilotos y constructores.
Otra posibilidad para incentivar a los pilotos a tomarse más en serio este tipo de carreras sería buscar un patrocinador para las Sprint Races que ofrezca una importante cantidad económica a aquellos competidores que acaben en posiciones de podio. El premio podría llegar al millón de dólares para el ganador.
Algunos equipos, como es el caso de Red Bull, se muestran receptivos al cambio. "Creo que hay que añadir un poco más de riesgo. Si se invierte el orden de los 10 primeros o algo así, hay que añadir suficientes puntos para que merezca la pena que los pilotos vayan a por ello", defendía Horner.
Sin embargo, otras escuderías como Mercedes se pronuncian en contra de la posibilidad de parrilla invertida. "Prefiero que no haya carreras al sprint a que empiecen a entrometerse. Aún más con las carreras de parrilla invertida, vamos hacia categorías junior en las que el deporte sigue al entretenimiento, mientras que el entretenimiento debería seguir al deporte", sentenciaba Toto Wolff.
Sea como fuere, todo parece indicar que el formato Sprint va a sufrir una transformación para que pilotos y aficionados vuelvan a recobrar la emoción por ver este tipo de carreras y no se desenganchen de la Fórmula 1.