Mientras el Mundial de Resistencia se encamina hacia una encrucijada tras el anuncio de la marcha de Porsche de su categoría reina, LMP1, el futuro no puede ser más próspero para la especialidad en Estados Unidos. es un éxito a nivel de marcas y ello ha invitado a Honda a implicarse de nuevo en la especialidad con este Acura ARX-05 DPi. La marca japonesa lo hará acompañada de otro prestigioso nombre de vuelta a las carreras de resistencia como es Penske. La estructura de Roger Penske
pondrá en pista dos ARX-05 basados en el Oreca 07 LMP2 y convenientemente modificados para que su estética recuerde a los de los Acura de calle. El motor será un viejo conocido de HPD, brazo de competición de Honda en EEUU, un motor V6 biturbo de 3,5 litros ya empleado en LMP2 y Daytona Prototypes de anterior generación.
La decisión de alinear dos ARX-05 en la temporada 2018 del United SportsCar Championship norteamericano implica que Penske necesitará cuatro pilotos a tiempo completo y al menos dos más para las pruebas de larga duración que lo componen (24 Horas de Daytona, 12 Horas de Sebring, 6 Horas de Watkins Glen y Petit Le Mans). Por el momento hay dos confirmados:
Juan Pablo Montoya, que se encargó del primer test en suelo americano, y Dane Cameron, vigente campeón y hasta ahora piloto de uno de los Cadillac de Action Express. Los rumores vuelan sobre los otros codiciados asientos, sonando fuerte los nombres de Helio Castroneves, si Penske reduce de cuatro a tres el número de coches en IndyCar, y Ricky Taylor, actual líder del certamen IMSA junto a su hermano Jordan Taylor. Will Power y Simon Pagenaud, también pilotos de Penske en IndyCar, serían candidatos ideales de cara a las carreras de resistencia.
El debut oficial del ARX-05 DPi, que compartirá pista con que compite en categoría GTD del United SportsCar Championship, tendrá lugar el próximo mes de enero con motivo de las 24 Horas de Daytona 2018. Pero
Penske desea realizar antes una prueba a modo de entrenamiento: será en octubre, alineando en Petit Le Mans un Oreca 07 LMP2 bajo especificaciones FIA y con motor Gibson. El asalto de Hodna y Penske supone un
desafío potente para Cadillac, que ha dominado este primer año de reglamento DPi. Sólo Nissan ha logrado puntualmente inquietar a la casa americana, mientras que Mazda ha optado por replantearse su participación en este campeonato, no corriendo las últimas pruebas de 2017 y otorgando plenos poderes a Joest Racing, artífice de múltiples éxitos de Porsche y Audi en Le Mans. La pregunta que todas ellas se hacen es si algún día sus DPi podrán visitar el mítico circuito francés...