A FALTA DE 31 KILÓMETROS
Jornada muy complicada en Nueva Zelanda, con fuertes accidentes de Gus Greensmith y Elfyn Evans
Una etapa no apta para cardíacos. El Rally de Nueva Zelanda ya había puesto a prueba a los competidores durante la jornada del viernes con unos tramos que son considerados los más bellos del planeta, pero que cuando son regados por las lluvias, se convierten además en toda una trampa para los competidores, algo que se pudo apreciar con que después de que en el día más largo apenas se tuviera el abandono de Craig Breen, en la etapa del sábado la debacle ha sido mayúscula.
Hasta tres competidores de la categoría Rally1 han tenido que retirarse de la carrera, siendo especialmente destacados los fortísimos accidentes sufridos durante el bucle matinal por los británicos Elfyn Evans y Gus Greensmith, mientras que Takamoto Katsuta rompería su racha de rallies terminados de forma consecutiva y también se salía del camino en la segunda especial de la tarde, poniendo fin a esa estadística que le había colocado en posiciones de puntos en las 10 pruebas anteriores.
En el caso de Elfyn Evans, su error llegaba en el peor momento, cuando precisamente era líder y trataba de que sus perseguidores no se echaran encima. El galés perdía la trasera del Toyota GR Yaris Rally1 en una zona muy rápida, impactando contra un talud de tierra y estando muy cerca de volcar. Evans no tardaría en reemprender la marcha, con una velocidad que no parecía hacer presagiar la gran cantidad de daños que tenía su montura, especialmente por el radiador dañado y el portón del maletero arrancado y, con él, toda la aerodinámica. Aunque le vino bien la cancelación de la última especial de la mañana, Elfyn tuvo que decir adiós a la prueba al descubrir su equipo junto a los delegados de la FIA que la jaula de seguridad se encontraba dañada.
Para Greensmith sería también un choque a alta velocidad, precisamente después de sufrir subviraje al haber optado por una trazada muy interior en una curva de izquierdas que estaba anegada por las lluvias. Al igual que Toyota, M-Sport no tardaría en confirmar que tampoco su piloto se podrá reenganchar de cara a la jornada del domingo, por lo que Craig Breen se quedaba como único competidor oficial, mientras que es el privado, Lorenzo Bertelli, el único Ford Puma Rally1 entre los diez primeros. Afortunadamente, tanto Evans/Martin, como Greensmith/Andersson resultaban ilesos.
Con tres pilotos menos, pilotos como Oliver Solberg o Thierry Neuville veían asequible entrar entre los cinco primeros, todo ello a pesar de que el sueco se había quedado con su motor en tres cilindros y en el caso del belga, después de haberse quedado sin poder engranar la tercera marcha en las especiales de la mañana. Los dos, al igual que Ott Tänak, serían penalizados por haber empleado más energía del kit híbrido de la permitida en el séptimo tramo, algo que se debió a un error humano de uno de sus ingenieros al haber ajustado los parámetros para la primera pasada para dicha especial, pero haber olvidado hacerlo con la segunda.
Esta situación dejaba a los competidores de la marca surcoreana con menos opciones de responder el fuerte ritmo que ha imprimido Kalle Rovanperä durante el sábado (tres scratchas para él, los otros tres para Craig Breen), capaz de sacar de quicio a sus dos rivales campeones del mundo, tanto Sébastien Ogier como Ott Tänak y distanciarse de ellos hasta los 29 y los 46,4 segundos respectivamente, dejando prácticamente visto para sentencia su primer título de Campeón del Mundo absoluto cuando apenas restan 35 kilómetros cronometrados por disputarse en la etapa del domingo.
El francés, que decidía regresar al WRC este fin de semana para tratar de ganar una de sus carreras favoritas, finalmente se ha encontrado con la difícil realidad de que tendrá que respetar posiciones, no sólo por Rovanperä, sino que, por el abandono de Evans, Toyota podría quedar en desventaja en el caso de que se produjera una nueva retirada de sus dos unidades oficiales que se mantienen en carrera mientras que Hyundai tiene los tres coches entre los cinco primeros. Para Tänak, los 15 segundos de penalización, sumados a un sábado en el que se ha mostrado mucho menos cómodo con el Hyundai, parecen haber terminado por dejarle fuera de la carrera por su segundo título.
Debemos recordar que si Rovanperä consigue en Nueva Zelanda su sexta victoria de la temporada entonces le valdrá con sacar otros siete puntos a Ott este fin de semana para ser Campeón del Mundo, algo que, a la espera de la Power Stage, ya se estaría dando con la primera plaza de Kalle y la tercera del estonio, 25 puntos frente a 15. De conseguirlo, será su primer título intercontinental absoluto, el segundo internacional tras haber ganado el WRC2 Pro en 2019.
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