Accidente de Carlos Sainz en Q2
El británico ralentizó en su último intento para también frenar a los dos Red Bull y dejar sin vuelta a Checo Pérez
Durante los tres entrenamientos libres disputados este fin de semana en Hungaroring, los pilotos de Mercedes-AMG F1 y Red Bull Racing habían copado los mejores tiempos. Después de lo vivido en el Gran Premio de Gran Bretaña, era evidente que con la llegada del Mundial de Fórmula 1 al trazado magiar la tensión no iba a desaparecer, especialmente si tenemos en cuenta que estábamos a las puertas del parón veraniego y que no se está jugando únicamente la batalla por los títulos, sino que muchos están todavía en conversaciones con los equipos para asegurarse un asiento de cara a la temporada 2022.
Si en Silverstone ya consiguió Mercedes arrebatarle la Pole Position para la Carrera al Sprint, aquí Lewis Hamilton no ha perdido la oportunidad de sumar su octava primera posición en parrilla de cara al Gran Premio del domingo, con el británico asestando un golpe sobre la mesa después de haber tirado de estrategia a la hora de ralentizar el ritmo por delante de los Red Bull en el último intento para que estos apenas tuvieran tiempo para hacer sus respectivas vueltas, algo que en el caso de Pérez le supondría no haber hecho el último giro para escalar posiciones.
Con este movimiento, no sólo Lewis Hamilton se hacía con la Pole del Gran Premio de Hungría, sino que conseguía Valtteri Bottas la segunda posición en la primera línea de parrilla y así pudiendo frenar en parte el ataque del holandés en la primera frenada. Compartiendo esta fila con Checo Pérez a pesar de que el mexicano no mejoró ni tan siquiera una décima, algo que sí lograría el neerlandés, insuficiente para superar la vuelta que Lewis ya tenía en el “banco”. Hubo abucheos contra el de Mercedes, con una grada de la recta principal en la que había mayoría de aficionados de Verstappen.
Cuando parecía que la puerta se podía abrir para el resto, nos encontramos con que el puesto de mejor piloto del resto, con Pierre Gasly demostrando que la fortaleza de AlphaTauri no estaba únicamente en los viernes, sino que también era capaz de ganarle la partida al McLaren de Lando Norris y el Ferrari de Charles Leclerc. No era un buen fin de semana para los de Maranello sin embargo, ya que a la séptima plaza del monegasco se sumó la 15ª de un Carlos Sainz que se fue contra las barreras en Q2, esperando que esto no le traiga además consecuencias en el apartado mecánico, ya que en un calendario con más de 20 carreras algunos equipos ya están llegando al límite de elementos máximos permitidos.
La lucha por la Q2 fue muy apretada, y a pesar de que los pilotos de Mercedes y de Red Bull intentaron hacer su registro con los medios, finalmente salieron con las ruedas blandas una vez que la sesión se restableció tras el accidente de Sainz en esa última curva. Al madrileño le acompañarían Daniel Ricciardo, Lance Stroll y los Alfa Romeo, con Kimi Räikkönen superando por tercera vez a Antonio Giovinazzi esta temporada. Mucho mejor día para los Alpine, capaces de colocar los dos monoplazas entre los 10 primeros, siendo Esteban Ocon mejor que Fernando Alonso, noveno, revirtiendo la tendencia en el duelo entre ambos compañeros de equipo, donde el asturiano había completado grandes actuaciones desde el Gran Premio de Francia.
En Q1 los eliminados fueron los dos Williams, con George Russel quedándose lejos en este caso del milagro de colocar a uno de los monoplazas en la siguiente fase de la clasificación, acompañado en este caso por Yuki Tsunoda y los dos HAAS. Mick Schumacher ni siquiera pudo rodar después de que un accidente en los terceros entrenamientos libres dejara su coche demasiado dañado como para poder tomar parte en la lucha por la pole. Daniel Ricciardo se salvó por los pelos, entrando dentro del corte en 15ª posición.