Daniel Ricciardo vuelve al podio aprovechándose del pinchazo de Max Verstappen.
El Gran Premio de la Emilia-Romaña se resolvió con doblete y nuevo título del equipo Mercedes.
Mercedes ya tiene siete títulos de Campeones del Mundo de Constructores tras un Gran Premio de la Emilia-Romaña en el que el equipo de Brackley logró un nuevo doblete. Lewis Hamilton se proclamó vencedor gracias a un ritmo superior y a la afortunada presencia de un Virtual Safety Car justo cuando él pasó por boxes. Valtteri Bottas terminó en segunda posición tras sufrir con daños en el fondo plano de su coche, mientras Daniel Ricciardo se subió al podio por segunda vez esta temporada. Carlos Sainz salvó el desastre de un toque con Alexander Albon in extremis y acabó séptimo para seguir sumando puntos importantes para la general.
Después de una sesión clasificatoria interesante, Valtteri Bottas lograba la pole position y partía desde la primera posición por delante de Lewis Hamilton y Max Verstappen. La primera sorpresa del fin de semana la protagonizaba Pierre Gasly, cuarto en parrilla con el primer AlphaTauri mientras Daniel Ricciardo y Alexander Albon ocupaban la tercera fila de parrilla. Charles Leclerc y Daniil Kvyat eran séptimo y octavo respectivamente, mientras los McLaren de Lando Norris y Carlos Sainz cerraban el top 10. Con esta situación en parrilla, la primera curva se planteaba como el principal punto de atención en la salida ya que con lo estrecho del trazado, el ángulo de la chicane de Tamburello y el orden de partida, la tensión estaba garantizada.
En el momento de la salida, Verstappen partió mejor que los Mercedes y logró superar a Hamilton, situándose en segunda posición mientras por detrás un toque con Vettel forzaba el trompo de Magnussen poco después de un toque que dañó el alerón delantero de Stroll. Tras Hamilton, Ricciardo realizó una buena partida y superó a Gasly para tomar la cuarta posición. En la vuelta 7, Sainz superó a un Norris que no ofreció resistencia al ser claramente más veloz el español. Al término de la vuelta 8, Gasly tuvo que retirarse por problemas técnicos terminales. Desafortunado final para el francés, que era quinto y optaba a un resultado importante para que AlphaTauri pudiera pelear con Ferrari en el Campeonato de Constructores.
Las primeras paradas llegaron poco después de la primera decena de vueltas, con Grosjean y Giovinazzi abriendo la ‘temporada’ de pasos por boxes. La mayoría de pilotos montaron neumáticos duros, con algunos hombres como los pilotos de McLaren optando por montar gomas medias. Mientras tanto, Ocon se retiraba con problemas técnicos. Esta situación causó un brevísimo Virtual Safety Car que le dio a Hamilton la mejor oportunidad para parar en boxes y ganar tiempo que le permitía volver a pista en primera posición y con una buena ventaja sobre su compañero de equipo. Otro piloto que ganó mucho en la estrategia fue un Pérez que alargó mucho su parada para ganarse el cuarto puesto.
Un hombre que tenía la oportunidad de aprovechar una buena estrategia era Vettel, que quizás habría podido mantenerse dentro del top 10 tras su parada pero que sufrió un mal cambio de neumáticos que le hizo perder diez segundos. En la vuelta 42 y con daños evidentes en su monoplaza que le complicaban la vida con un mal ritmo, Bottas se salió levemente de pista y eso permitió que Verstappen le superara con relativa facilidad. Pero el piloto de Red Bull protagonizó la sorpresa del GP al sufrir un pinchazo a falta de 11 vueltas que le dejó fuera de carrera, causando la salida del Safety Car. Pasaron por boxes Hamilton, Bottas, Pérez, Kvyat y Sainz para montar gomas blandas.
Durante el periodo de coche de seguridad, Russell perdió el control del coche y acabó contra el muro, demorando la neutralización. La resalida se produjo a falta de 6 vueltas para el final con un Pérez que daba cuenta de Albon antes de que este último trompeara mientras Kvyat superaba a Leclerc y se lanzaba en persecución de Ricciardo en la lucha por el podio. Por su parte, Leclerc se defendía de los ataques de Pérez en su pelea particular por el quinto puesto. Finalmente, la lucha por las últimas posiciones en los puntos incluían a los McLaren, los Alfa Romeo y el Williams superviviente.
Sin ningún desafío entre los hombres de Mercedes, Lewis Hamilton se llevó la victoria por delante de Valtteri Bottas, permitiendo que la marca alemana firmara su séptimo título de constructores consecutivo. Tras los hombres de Brackley, Daniel Ricciardo logró volver a subirse al podio con una celebrada tercera posición. Fuera del podio, Daniil Kvyat fue cuarto por delante de Charles Leclerc para mantener la presión de AlphaTauri sobre Ferrari. Sergio Pérez finalizó en sexta posición con Carlos Sainz séptimo por delante de Lando Norris. De forma sorpresiva, los Alfa Romeo resolvieron el día con ambos coches en los puntos gracias a la novena y décima posición de Kimi Räikkönen y Antonio Giovinazzi.
La visita de la Fórmula 1 a Imola se resolvió con suficientes elementos de sorpresa como para convencer a pesar de haber sido una carrera relativamente tranquila. Las últimas vueltas añadieron el picante que le había faltado a los primeros dos tercios de la prueba. Sin expectativas de que Imola esté en el calendario a medio plazo, la categoría reina debe mirar este fin de semana con cariño, siendo esta una buena oportunidad de ‘despedirse’ de un circuito con demasiados recuerdos tristes pero que por un fin de semana se vistió de gala para recordar por qué siempre fue un escenario tan querido. El próximo destino, un Gran Premio de Turquía en el que Lewis Hamilton debería ser campeón.