FIA y ACO quieren atraer de nuevo marcas a la categoría reina
Serán coches híbridos a un cuarto del coste actual de los LMP1
Le Mans necesitaba un nuevo reglamento. Pese a la llegada de equipos privados, la marcha en años consecutivos de Nissan, Audi y Porsche había dejado LMP1 con una inscripción algo pobre y sólo sustentada por la presencia de Toyota. Por ello FIA y ACO decidieron tirar a la basura el reglamento 2020 presentado hace un año y ser menos ambiciosos. El resultado lo conocimos este viernes y está basado en el éxito de los hipercoches.
La nueva categoría reina de las24 Horas de Le Mans y el Mundial de Resistencia, aún sin nombre, buscará aunar una estética reconocible de cada coche con igualdad de prestaciones y costes contenidos. De ahí que se intente dar más importancia a la aerodinámica por debajo de los prototipos a cambio de ofrecer a los fabricantes una mayor libertad en el diseño estético de los prototipos. Clave será que los aficionados puedan saber a simple vista de qué marca es cada participante. Para ello se reforzará la idea de que cada coche sea biplaza y se aumentará el peso mínimo (980 kilos).
Le Mans no renuncia a la hibridación, pero con el fin de contener costes se ha buscado simplificar a nivel técnico la categoría reina. Sólo se empleará un sistema de recuperación de energía en el eje delantero, algo menos potente que en la actualidad (270 caballos) y que además deberá estar disponible para equipos privados a un precio fijo. A nivel de motor térmico se mantiene una gran libertad, pero buscando que la potencia ronde siempre los 700 caballos y controlando el consumo.
Los cálculos iniciales de FIA y ACO indican que estos nuevos coches serán capaces de rodar en 3:20 por el circuito de Le Mans, es decir, unos cinco segundos más lento que los actuales LMP1, aunque con un coste cuatro veces menor. Queda en el aire la posible unificación reglamentaria con los DPi estadounidenses, una vía que se viene negociando desde hace meses con IMSA y que podría atraer a las marcas ya involucradas en resistencia al otro lado del charco (Cadillac, Acura, Nissan y Mazda).
Lo que por el momento no veremos en las 24 Horas de Le Mans es un vehículo propulsado por hidrógeno luchando por la victoria. Aunque se sigue trabajando en ello, los organizadores han comunicado que no habrá reglamento al respecto hasta 2024. Y aunque creen que es el futuro de la automoción, 2024 supondrá once años desde que por GreenGT intentara sin éxito participar por primera vez usando hidrógeno como carburante. ¿Será entonces la vencida?