Max Verstappen se lleva el triunfo en un GP de Mónaco loco por la lluvia

Al igual que el año pasado, el Gran Premio de Mónaco nos iba a reservar toda la emoción en el momento de la aparición de la lluvia, después de una salida en la que prácticamente todos los competidores iban a respetar las posiciones a pesar de los intentos de ataque de Esteban Ocon sobre Fernando Alonso y de Lewis Hamilton sobre Carlos Sainz. Arranque limpio, sin prácticamente contactos a lo largo de la estrecha pista monegasca y un equilibrio que estaba esperando a que alguien pudiera romperlo.

Poco después, Carlos Sainz intentaría el adelantamiento sobre Esteban Ocon, pero la jugada no le saldría bien, golpeándose con el Alpine del piloto francés y terminando la acción saltándose la chicane y dañando uno de los endplates de su alerón delantero. A partir de ahí, Carlos continuó en pista, pero siguió perdiendo tiempo a espaldas de Ocon y buscando desesperadamente cómo intentar el adelantamiento. Amagos de paradas para realizar un undercut, nuevos ataques hasta que finalmente el piloto galo terminó deteniéndose para hacer su cambio.

Sainz se quedaba en esos momentos con aire libre, sin embargo, en Ferrari le hicieron parar inmediatamente, algo que le llevó a no poder aprovechar una parada que ya de por sí fue lenta para intentar superarle. Esteban salió de nuevo por delante de Sainz, manteniendo la tercera posición del podio virtual en esos momentos, a la espera de todo lo que estaba por llegar de la mano de la lluvia cuando todavía quedaban más de veinte vueltas hasta el final.

Hasta la aparición de las precipitaciones, la atención se centraba en ver cómo evolucionaba el desgaste en los neumáticos de compuesto medio de Max Verstappen, la lucha en las posiciones posteriores donde Lance Stroll, el HAAS de Kevin Magnussen (los dos terminarían siendo los únicos pilotos retirados del GP de Mónaco 2023) y el Red Bull de Checo Pérez pusieron mucho del picante, siendo el piloto danés el que se llevaba dos embestidas de los dos competidores norteamericanos.

Sin embargo, la vorágine que se iba a desatar con la aparición de las primeras gotas sería la que iba a marcar una vez más la carrera, tal y como ya sucedió en la edición del año pasado. Los pilotos se iban a resistir a la hora de montar la goma intermedia de lluvia, hasta el punto de que, Fernando Alonso, que entró cuando la lluvia ya caía sobre el asfalto del Principado, vio cómo en su equipo optaban por montarle el neumático de compuesto medio slick, por lo que tendría que hacer una segunda parada después de que la lluvia arreciara y dejase completamente empapada la bajada hacia Mirabeau.

No sería el único piloto en tener problemas y de tener una visita con las protecciones. Lance Stroll sufriría el segundo abandono del año después de irse recto también en la frenada de Mirabeau. Además de él, Kevin Magnussen también trataría de aguantar el neumático duro y cuando finalmente tomaron la decisión en HAAS de poner el ‘Full Wet’, el piloto autor de la pole el año pasado en Brasil se iba contra el muro. Una vez ya montada la goma de lluvia extrema, el monoplaza estadounidense se iría también recto en Santa Devota.

Incluso Carlos Sainz tendría un error en la complicada frenada en bajada cuando todavía llevaba el neumático de seco que le llevaría a tocar las protecciones. El madrileño pudo continuar en carrera, pero para entonces ya le había superado incluso su compañero de equipo, Charles Leclerc, el cual le hizo de tapón en la recta después de la chicane del túnel sabiendo en esos momentos que, si el español le superaba en esos momentos, todo iba a terminar con Carlos Sainz teniendo la posibilidad de parar a poner los intermedios por delante en el turno, lo que obligaría al monegasco a tener que esperar. Lo frenó, lo tapó en plena recta y aguantó la posición.

Con el paso de las vueltas y, a pesar de que algunos pilotos como el propio Nico Hülkenberg también montaban el Full Wet, la lluvia fue a menos y esto permitió que poco a poco fuera apareciendo el carril seco. Max Verstappen arriesgó, especialmente cuando comenzó a ver la diferencia respecto a Fernando Alonso por debajo de los 17 segundos, momento en el que el neerlandés comenzó a acercarse a los muros, hasta el punto de que incluso llegó a rozarlo en la salida de la chicane de la piscina, algo que finalmente no le deparó daños mayores.

Se quitó la espinita Verstappen de lo sucedido el año pasado, consiguiendo su cuarto Gran Premio de la temporada (39ª victoria de su carrera) y permitiendo que Red Bull Racing se mantenga invatida, habiendo ganado las seis fechas disputadas hasta el momento, sumada a la victoria de Checo Pérez en la cita al sprint del sábado Azerbaiyán. También Fernando Alonso seguía subido al podio, consiguiendo el quinto en lo que va de año y su mejor resultado en una carrera de Fórmula 1 desde Hungría 2014. Podio número 103 de Alonso en el fin de semana en el que rozó con la punta de los dedos la 23ª pole position de su carrera deportiva. Esteban Ocon sería el último ocupante del podio, tercero, por delante de los Mercedes de Lewis Hamilton (vuelta rápida de carrera) y George Russell, mientras que el mejor Ferrari sería el de Charles Leclerc, sexto, justo por delante de Pierre Gasly y de Carlos Sainz. Completaban las diez primeras plazas los dos McLaren de Lando Norris y Oscar Piastri.

Fin de semana que le sirve a Max Verstappen para extender su ventaja al frente de la general, aprovechando que, en este caso Checo Pérez había tenido un accidente en Q1 que le llevó a partir muy atrás en la clasificación. Ya son 144 puntos para el vigente Campeón del Mundo por los 105 de Checo Pérez y los 93 de Fernando Alonso. En constructores las diferencias se disparan con los 243 de Red Bull por los 120 de Aston Martin, los 119 de Mercedes y los 90 de Ferrari.

Resultados del Gran Premio de Mónaco 2023