El estonio lograba su segundo triunfo con Hyundai Motorsport en el Mundial
Fin de semana reservado para los jóvenes, con Kalle Rovanperä situándose líder del Mundial y con Oliver Solberg llamando a la puerta en su debut.
Quedaban poco menos de 45 kilómetros para que la primera edición del Arctic Rally llegase a su final, sin embargo, esas dos especiales debían todavía definir las posiciones del podio y el resto de los lugares con derecho a puntos. Ott Tänak tenía de renta 24,1 segundos por lo que el estonio supo gestionar esta renta para superar sin excesivos contratiempos las dos pasadas por Aittajärvi y conseguir junto a Martin Järveoja su segunda victoria como competidores del equipo Hyundai Motorsport.
No hubo variaciones en esa primera plaza, con el estonio asegurándose el triunfo a pesar de no poder pelear por los puntos extra en la Power Stage. Hubiera tenido que apretar mucho para superar a un Kalle Rovanperä completamente desbocado, defendiendo su segunda posición en el podio que sumado a los cinco puntos extra le daban el liderato en el Campeonato del Mundo de Rallies. El finés se convierte en el más joven de la historia en lograrlo, aunque sigue persiguiendo también el lograr ser el ganador más joven de una prueba del WRC, récord que ostenta su jefe de equipo, Jari-Matti Latvala. Cumplirá 21 años el próximo 1 de octubre, por lo que todavía tendrá más de un año para tratar de asaltar este hito.
El finlandés ha sido el más regular en este inicio de temporada junto a Thierry Neuville, el cual terminó en el podio por segundo rally consecutivo. El belga de Hyundai Motorsport se ha quejado durante todo el fin de semana de falta de comunicación con su nuevo copiloto, Martijn Wydaeghe, el cual llegó para sustituir a Nicolas Gilsoul a apenas una semana del inicio del Rally de Montecarlo. Comenzaba el día a menos de dos segundos de Kalle, pero el ritmo impuesto por el finlandés sería inalcanzable. Aun así, el resultado le permite situarse segundo de la general, a 4 puntos de la cabeza de la tabla.
El duelo por ocupar la cuarta posición se decidió sorprendentemente también en favor de los Hyundai, los cuales dieron el do de pecho en una prueba que teóricamente iba a ser coto privado de Toyota GAZOO Racing. Craig Breen realizaba una actuación sin fisuras a pesar de llevar desde septiembre de 2020 sin subirse al i20 Coupé WRC, manteniendo a raya a Elfyn Evans y haciendo a la perfección la labor que actualmente encomienda Andrea Adamo a los pilotos encargados de la tercera unidad oficial.
Donde sí habría cambio de tornas sería en la sexta plaza, la cual parecía que iba a ser meritoriamente para Oliver Solberg, pero que por segundo rally consecutivo estaría ocupada por Takamoto Katsuta. El japonés se aprovechaba de que la demostración de fuerza del debutante, Oliver Solberg, le salía mal, y cuando venía en tiempos para tratar de arrebatarle el mejor tiempo provisional en la Power Stage a Sébastien Ogier, un toque con la parte trasera le llevaba a tener su segundo trompo del fin de semana y a ceder la plaza. Llegado a meta, el sueco, hijo de Petter Solberg, era consciente de que, a pesar de este incidente, había dejado una firma imborrable en su primer fin de semana con un World Rally Car.
Completaron el Top10 los dos Ford Fiesta WRC de M-Sport, muy desdibujados en lo que llevamos de temporada y sin evoluciones a la vista ya que han centrado sus esfuerzos en desarrollar el coche para 2022. Su competitividad se ha visto tan afectada durante los dos últimos años que ya poco queda de ese coche con el que brillaron en el pasado tanto Ogier (bicampeón en 2017 y 2018 con los de Cumbria) como Tänak y Evans. Décimo era Esapekka Lappi, ganador en WRC2, mientras que Teemu Asunmaa hacía lo propio en WRC3.