A lo largo de los 33 años de historia de la época moderna del Pikes Peak International Hill Climb hay una marca que ha destacado por encima de las demás. Muchos hablan de los históricos triunfos de Audi y Peugeot en los años 80 o de la época gloriosa de Toyota en los 90 pero
no hay nadie que haya obtenido tantas victorias en la subida de montaña más difícil del mundo como Suzuki. Aunque la marca es poco conocida por sus coches de carrera,
Suzuki cuenta con un muy valorable total de diez victorias, lo que significa que hasta no hace demasiado un tercio de las carreras había sido ganado por Suzuki y sus espectaculares coches. Su historia comenzó en 1992 y 1993 con las victorias del Swift, conocido en Japón como Cultus, en su versión para subidas de montaña.
El piloto elegido para tirar de valor y pelearse con la gravilla, el bajo agarre y la monstruosa potencia del Cultus para lograr los primeros triunfos fue el popular Nobuhiro "Monster" Tajima.
El japonés se convertiría en una leyenda de la prueba norteamericana al acabar logrando un total de nueve coronas del Pikes Peak, todas ellas con Suzuki. Sólo Yutaka Awazuhara se añadió al panteón de ganadores con Suzuki al imponerse en la edición de 2001. Pero si Tajima es una leyenda del Pikes Peak,
su igualmente famoso compañero de viaje tiene que ser la espectacularísima versión del Vitara para subidas de montaña,
el Suzuki Escudo Hill Climb cuyo
look ultra agresivo con un enorme alerón trasero y
splitters nunca vistos cautivaron a toda una generación. En parte, la popularidad del Escudo se benefició de su presencia en la saga de videojuegos Gran Turismo.
La primera victoria del Escudo llegó en 1995 con la primera edición que tuvo un recorrido recortado, antes de sentar las bases para la evolución de los Suzuki del Pikes Peak a lo largo de los siguientes quince años. Visualmente, es fácil ver en todos los Suzuki ganadores de la prueba americana el ADN del Escudo aunque luego nominalmente estos se basaran en los XL7 y SX4. Las formas del frontal, los
splitter y el alerón trasero son los elementos más evidentes pero había más.
Para Tajima, tras su victoria en 1995 hubo que esperar once años hasta repetir victoria, lo que logró en 2006 en una nueva edición con recorrido más corto a bordo de la última versión bajo el nombre de Suzuki Escudo antes de triunfar con una nueva versión de la máquina preparada por su equipo de carreras sobre la base del XL7 en 2007.
Con una evolución del XL7 se impuso también en 2008 antes de reemplazarlo con el moderno SX4. La historia del heredero del mítico Escudo se completó en 2011 con la última victoria de Suzuki en el Pikes Peak,
logrando además el récord histórico, siendo Tajima el primer participante en bajar de los diez minutos. Desde entonces, el registro ha sido rebajado en casi dos minutos con Sébastien Loeb y Peugeot pero Suzuki quedará en la historia como la primera marca en bajar de la barrera psicológica y deportiva de los diez minutos. Este año se buscará bajar de los ocho... ¿habrá historia? ¿Volverá Suzuki a la competición en un futuro próximo?