El francés conseguía su primer triunfo de lo que llevamos de prueba
Las opciones de Nasser Al-Attiyah y Carlos Sainz de evitar el que sería el octavo Dakar en coches de Peterhansel se han reducido mucho en la novena etapa.
Aunque era la etapa maratón la que parecía que iba a cambiar la deriva de la actual edición del Rally Dakar 2021, finalmente ha sido la novena jornada la que ha empezado a definir quiénes son los grandes candidatos a llevarse el triunfo en las principales categorías. En estas condiciones siempre tan complejas de presión, era Stéphane Peterhansel el que salía a flote, copilotado de forma excelente desde el inicio de la prueba por su nuevo navegante, Edoard Boulanger, en un día en el que Monsieur Dakar ha dado un paso gigantesco hacia lo que puede ser su 14º triunfo en el rally-raid organizado por ASO.
Tuvo que esperar el francés hasta esta etapa de la segunda semana para conseguir su primer triunfo parcial. Peterhasnel se lanzaba al ataque en el día en que sus rivales tenían que sufrir más, con Nasser Al-Attiyah encajando una nueva pérdida de 12 minutos tras dos pinchazos y un error de navegación, mientras que Carlos Sainz y Lucas Cruz se dejaban más de 22 minutos por un problema de frenos que le ha dejado sin líquido en el circuito durante gran parte de la etapa, obligado a parar el MINI JCW Buggy a través del motor.
Las diferencias siguen siendo salvables, especialmente los 17 minutos y 50 segundos que figuran actualmente como desventaja del qatarí respecto a Peterhansel, sin embargo, se le ha puesto la carrera a Stéphane donde él quería. Mañana estará abriendo pista, pero teniendo un colchón lo suficientemente grande como para dejarse dar caza por Al-Attiyah y rodar con él durante el resto de la etapa como forma de mantener en todo momento marcado de cerca. Para Sainz la cosa se ha puesto muy cuesta arriba, ya que la desventaja está por encima de la hora y dos minutos, por lo que, de no ser por un problema grave de sus rivales, la opción de sumar su cuarto Dakar se ha complicado demasiado.
Con tres etapas por delante, Nani Roma mantiene su particular lucha por terminar entre los cinco primeros. El catalán tiene a 26 minutos por delante al ganador de la Copa del Mundo FIA de Rallies Cross-Country en 2018, Jakub Przygonski, mientras que sexto está Khalid Al-Qassimi con uno de los Peugeot 3008 DKR exoficiales a una distancia de 19 minutos, media hora si tenemos como referencia el MINI JCW Rally de Vladimir Vasilyev.
En motos, ha sido una jornada dramática, marcada en este caso por las caídas de Toby Price y de Luciano Benavides, ambos evacuados en helicóptero hacia el hospital de Tabuk, donde ambos serían sometidos a pruebas radiológicas para comprobar el alcance de sus lesiones, en el caso del australiano de KTM Factory en brazo y hombro izquierdo, mientras que para el argentino de Husqvarna, el traumatismo se producía en el lado derecho. Los dos equipos quedaban entonces muy condicionados, con Sam Sunderland y Pablo Quintanilla como principales representantes, mientras que Ross Branch firmaba el tercer abandono de Yamaha por rotura de motor en menos de una semana.
La caída de Price dejaba en bandeja la opción de que el chileno Nacho Cornejo ampliase diferencias al frente de la general, algo que aprovechaba terminando la etapa en tercera posición, detrás de sus compañeros en la marca del ala dorada, Kevin Benavides y Ricky Brabec. Ha habido que esperar a que los tiempos se corrigieron por los comisarios deportivos, ya que tanto Sunderland como Brabec y Quintanilla habían parado a auxiliar a los otros competidores. También Joan Barreda sufriría una caída en la que perdía el conocimiento por unos instantes, pero el castellonense se volvía a subir en la moto y actualmente es quinto a 29 minutos de Cornejo.