Desde los Países Bajos nos hacemos eco de una genial
iniciativa basada en la última tecnología para conseguir que los semáforos no nos hagan perder más tiempo y dinero. Seguro que en más de una ocasión habrás tenido que detenerte en un semáforo en rojo cuando nadie en tu alrededor está esperando para cruzar en verde. Esta situación se repite muchas más veces de las que nos gustaría, y es que
los actuales semáforos se basan en protocolos fijos que no tienen en cuenta las necesidades cambiantes del tráfico.
Para acabar con la problemática de los cruces entre coches, peatones y ciclistas,
la localidad de 's-Hertogenbosch ha introducido un sistema basado en cámaras de vídeo y complejos algoritmos para adaptar el funcionamiento de los semáforos al tráfico real existente. Empleando secuencias de paso para cada uno de los cruces, ofrece prioridad y tiempo de paso en función de las necesidades de cada cruce, consiguiendo así que nadie desperdicie más tiempo del necesario para que pase el otro.
La idea detrás de esta iniciativa es poder
agilizar el tráfico en todos los sentidos, consiguiendo así que los usuarios no se vean lastrados por el obligado cumplimiento de las leyes cuando realmente no es necesario detenerse al no haber nadie al que cederle el paso. Con esta medida además se consigue optimizar el tráfico en todo tipo de situaciones, desde graves congestiones, hasta momentos donde es casi inexistente el tráfico. Si en una localidad como 's-Hertogenbosch, de apenas 15.000 habitantes, empleasen este sistema en todas y cada unas de sus intersecciones, un conductor podría cruzar todo el pueblo sin encontrar un semáforo en rojo mientras no encuentre nadie que se cruce en su camino. En Centímetros Cúbicos: |