El SUV que nació bajo el concepto del 'todocamino'
Celebramos los 20 años del Hyundai Santa Fe, un modelo que ha ido evolucionando desde su lanzamiento en el año 2000 hasta convertirse en uno de los SUVs que compite en la liga de los segmentos premium.
Los SUVs están más de moda que nunca. Los podemos encontrar de todos los tamaños y para todos los bolsillos, aunque los compactos son los más populares.
Pero también hay un nicho en el mercado que apunta a los 'todocaminos' de grandes dimensiones, con hasta siete plazas. Es ahí donde comenzó Hyundai con el Santa Fe, que ya ha cumplido más de 20 años en el mercado, siendo el primer SUV que desarrolló la marca coreana.
La primera generación fue presentada en el Salón de Ginebra del año 2000 y se desarrolló bajo el concepto de un 'todocamino' versátil tanto dentro como fuera del asfalto. Aunque también fuese funcional para el día a día. Su éxito fue tan inmediato que, en 2001, la marca coreana tuvo que ampliar la producción. En su gama contó con dos motores principales de gasolina, con hasta 180 CV, aunque también existía un bloque diésel de 116 CV que pretendía hacerse su hueco en Europa.
En 2006 llegó su sustituto, la segunda generación del Santa Fe. Cambió por fuera y por dentro, pero lo más importante fue que, por primera vez, ofrecía una configuración de siete asientos.
Su diseño comenzaba a mostrar una parrilla con más protagonismo, con pilotos delanteros más alargados, y unos paragolpes más estilizados, sin tantas protecciones. También contó con tres motores; dos gasolina de 189 y 235 CV, así como un diésel que, de nuevo, se lanzó pensando en Europa, ahora con un aumento de potencia hasta los 155 CV.
No fue hasta el 2012 la llegada de la tercera generación del Santa Fe, que supuso un salto cualitativo tan grande para aquella época que, incluso en la actualidad, luce una apariencia moderna.
En esta generación la parrilla ganó terreno al frontal. De forma trapezoidal, contaba con unos faros diurnos con tecnología LED, unos pasos de ruedas marcados y un 'look' bastante atlético pese a que se trataba de un modelo familiar. Hyundai decidió ofrecer la tercera generación del Santa Fe en dos carrocerías: la primera estándar contaría con cinco plazas; mientras que la Grand Santa Fe se estrenaría un año después con siete asientos y 10 cm más de largo. Los acabados interiores mejoraron mucho, así como la tecnología, que contó con numerosos asistentes a la conducción. Fiel a la filosofía de ofrecer tres motores, en este caso serían dos diésel, de 150 y 200 CV, y solo un gasolina de 193 CV.
Llegamos al presente, con la cuarta generación del Hyundai Santa Fe, que llegó en 2018. Aunque en 2021 recibió una actualización que ya le hacía jugar en la liga los segmentos premium.
Tanto fue así, que su diseño cambió de manera radical, siendo mucho más moderno y atractivo, con una parrilla cromada de grandes dimensiones y una nueva firma lumínica con tecnología full LED. Dentro recibió un lavado de cara tecnológico, con un panel de instrumentos digital de 12,3 pulgadas y otra pantalla de 10,25 pulgadas para el sistema de infoentretenimiento. Pero los cambios que recibió no son meramente estéticos, sino que también afectaron a plataforma, motor y chasis para reforzar el conjunto. De serie cuenta con siete plazas, siendo la única versión disponible, la cual puede ir asociada a varios motores: un motor diésel de 200 CV; un bloque híbrido autorrecargable de 230 CV; y otro híbrido enchufable de 265 CV.
Es más que evidente que las marcas coreanas han mejorado muchísimo en los últimos tiempos. Su objetivo desde hace unos años era ofrecer mucho más equipamiento, con un lenguaje de diseño rompedor, una calidad percibida y real de primera y mucha versatilidad. Algo que, viendo cómo ha ido evolucionando el Hyundai Santa Fe en estas décadas, se confirma a simple vista.