DOS INFRACCIONES
Por encima de las infracciones leves, graves y muy graves nos encontramos una serie de acciones fuera de la ley castigadas con dureza.
La mayor parte de las multas con las que son sancionados los conductores no suelen rebasar los 500 euros: una cifra que, como la pérdida de puntos en el carnet, dependerá siempre del tipo de infracción cometida. Eso sí, esta norma general tiene una serie de excepciones: acciones fuera de la norma que llevan aparejados castigos mucho más altos que pueden llegar a alcanzar los 20.000 euros: estas son las multas más elevadas que te pueden poner.
Un par de acciones
Son dos las infracciones que pueden constarle a los conductores hasta 20.000 euros: ambas están relacionadas con el estado de las carreteras y los elementos que forman parte de ellas.
De 1.000 a 6.000 euros
Estas sanciones no son las únicas que llevan aparejadas cifras elevadas: en la franja de los 1.000 a los 6.000 euros nos encontramos con las siguientes acciones fuera de la ley.
La tasa de alcohol permitida en España es de 0,25 mg/l en aire espirado para los conductores en general y de 0,15 mg/l para noveles y profesionales. Circular habiendo rebasado los 0,50 mg/l implica una multa de 1.000 euros y hacerlo por encima de los 0,60 mg/l supone un delito, según el Código Civil. En el caso de ponerse al volante bajo los efectos de las drogas, la cuantía arranca en la misma cifra: 1.000 euros… además de los seis puntos que se le restarán en el carnet de conducir. Negarse a realizar el control de alcoholemia o de drogas implica una sanción por la misma cantidad: 1.000 euros a los que hay que sumar la privación del derecho a conducir de uno a cuatro años y penas de prisión de seis meses a un año.
Circular sin el seguro obligatorio eleva todavía más el listón: en función del tipo de vehículo y del permiso necesario para conducirlo, el castigo económico puede ir desde los 601 hasta los 3.005 euros. Y, por último, llevar un inhibidor de radares (aunque no se use) está penado con una multa de hasta 6.000 euros para el conductor y de hasta 30.000 euros para el taller responsable de su instalación.