DE UN VISTAZO Y SIN SER MECÁNICO

3 averías en tu coche que puedes detectar simplemente mirando tus ruedas

Los neumáticos son elementos básicos en cuanto a seguridad vial. Saber interpretar su desgaste y su vida útil es básico para conocer el buen -o mal- estado de nuestro vehículo.

Los neumáticos son una parte fundamental cuando analizamos la seguridad que proporciona un vehículo durante su circulación. Estos elementos son las únicas piezas que son capaces de asegurar, en la medida de lo posible, el contacto del vehículo con el suelo. Por eso, y de manera paralela a lo que ha ocurrido con la tecnología de los vehículos, los neumáticos también han evolucionado para ofrecer un mayor rendimiento, una vida útil más larga y una adherencia más eficaz.

De nada sirve contar con el vehículo más moderno y avanzado del mercado si lo hacemos rodar con neumáticos en mal estado, ya que toda la carga tecnológica con la que cuenta nuestro coche no será puesta en la calzada de manera eficaz. En definitiva, es mucho más factible pensar en un accidente de tráfico a bordo de un coche de última generación con neumáticos "en las lonas" que en un accidente a bordo de un coche con años a sus espaldas pero con neumáticos de primera calidad y apenas desgaste.

Neumáticos kilometro cero | Pxfuel

Los neumáticos, además, pueden "hablarnos" y proporcionarnos información acerca del buen o mal estado mecánico de nuestro vehículo. Es posible, incluso, detectar anomalías y posibles averías de manera prematura si somos capaces de "entender" lo que nos muestran los neumáticos, permitiendo así una intervención mecánica antes de que sea demasiado tarde.

3 defectos de tu coche que puedes detectar con tus neumáticos

  • Desgaste irregular en el interior o en el exterior de la banda de rodadura: si la banda de rodadura de los neumáticos de tu coche no se desgastan de manera equilibrada, especialmente si el desgaste es acusado en la cara interior de la banda de rodadura, es posible que tu coche no esté bien alineado: los ángulos y las cotas de dirección y suspensión necesitan ser reajustados, ya que el coche está "pisando" de manera incorrecta y está provocando un desgaste demasiado alto en una zona muy concreta del neumático, acortando de manera notable su vida útil.
  • "Mordiscos" y "calvas" en el neumático: cuando un neumático muestra "calvas" en la banda de rodadura, suele estar provocado por un estado defectuoso del sistema de suspensión. El trabajo de la suspensión es absorber las irregularidades y mantener el neumático en contacto con el suelo, pero cuando los amortiguadores no funcionan correctamente, el neumático "rebota" y se pasa más tiempo del necesario en el aire cada vez que supera un bache, provocando un desgaste muy irregularidad en su banda de rodadura.
  • Roces en el flanco o falta de material: si el flanco del neumático (la parte en la que aparecen las inscripciones y el fabricante "graba" la marca y el modelo del neumático) aparece rallado o borrado, estamos asistiendo ante un fallo en el sistema de suspensión del coche o bien ante un problema de sujeción de piezas en el interior del paso de rueda del vehículo. Con el roce durante maniobras o durante la circulación, el neumático está soportando un desgaste y una presión innecesarias, de ahí que sea necesario actuar de urgencia para no provocar un reventón fortuito.