Tráfico no quiere ni una sola trampa
Los aspirantes a obtener el permiso de conducir, en el punto de mira.
Obtener el permiso de conducir es un trámite que cada año llevan a cabo miles y miles de españoles. La llegada de la mayoría de edad suele ser el punto de inflexión, en el que muchos jóvenes deciden obtener el permiso de conducir B para poder utilizar coches y, por lo tanto, disfrutar de la libertad propia de la edad y de poder conducir por cualquier lugar sin limitaciones.
Para obtener el permiso de conducir en nuestro país debemos enfrentarnos a dos exámenes. El primero es una prueba teórica, un examen tipo test en el que debemos conocer la respuesta correcta de 30 preguntas, con la posibilidad de fallar hasta 3 respuestas sin que ello suponga un suspenso en la prueba.
Tras superar la prueba teórica, es necesario aprobar una prueba práctica donde se evalúa nuestra capacidad para conducir y circular correctamente y con arreglo a la normativa en la vida real. Si hemos conseguido aprobar ambas pruebas, habremos obtenido finalmente nuestro ansiado “trofeo” en forma de permiso de conducir.
La DGT lleva tiempo trabajando en un nuevo marco legal para mejorar la circulación y las diferentes normativas, actualizando también las sanciones por cometer diferentes tipos de infracciones. Desde Tráfico se han propuesto acabar con los “tramposos” que intentan copiar en el examen de conducir, y lo quieren hacer a la fuerza.
¿Cómo? Sancionando fuertemente este tipo de comportamientos, utilizando todas las armas disponibles. De esta manera, la DGT sancionarán a los que intenten copiar en el examen teórico, sin ninguna distinción. Da igual que se utilicen auriculares conectados a una fuente de audio, un teléfono móvil, un ordenador o un “pinganillo”: en cualquier caso la sanción será dura y firme.
Aquellos que sean detectados copiando o intentando copiar en un examen teórico de la DGT serán sancionados con una multa de 500€, suponiendo además la expulsión inmediata de la prueba. No será la única “sanción” a la que tendrán que hacer frente los tramposos, ya que no les será posible volver a presentarse al examen teórico en un plazo mínimo de 6 meses.