EL MAYOR TEMOR EN ZONAS RURALES

Con la actual Ley de Bienestar Animal, ¿qué responsabilidad tienes si atropellas fauna salvaje y qué hacer en tal caso?

En nuestro país es muy habitual cruzarse en la carretera con animales en libertad. A veces, arrollarlos es inevitable. Esto es todo lo que debes saber al respecto.

El 29 de septiembre de 2023 entró en vigor la nueva ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales. Según la normativa en cuestión, se adoptan regulaciones más estrictas para los propietarios de los 29 millones de mascotas que hay en España. El objetivo principal de las medidas que se disponen desde entonces es luchar contra el maltrato, el abandono y el sacrificio de estos seres, pudiendo castigarse estos agravios con hasta tres años de prisión. Todos los circos, acuarios, zoológicos, tiendas, criaderos, protectoras, centros de adopción y algunos festejos populares se han visto afectados, pero ¿qué hay de los conductores ante un atropello?

Pese a que la comúnmente denominada Ley de Bienestar Animal se centra en criaturas domésticas, cuya responsabilidad en caso de arrollamiento es del dueño salvo cuando el accidente haya sido provocado por la imprudencia del conductor o su carencia de atención al reglamento se tráfico y seguridad vial, muchos usuarios se preguntan qué ocurre si el animal damnificado es salvaje. Al fin y al cabo, no son pocas las carreteras de nuestro país donde es normal cruzarse con fauna cinegética susceptible de causar serios percances.

Señal peligro animales salvajes | Pixabay

Pues bien, a pesar de los bulos que han aparecido durante los últimos meses, no hay novedades respecto a este supuesto. De este modo, el responsable de atropellar un ciervo o un jabalí, por citar dos de los ejemplos más habituales, continuará siendo el conductor, pues por un lado se interpreta que no ha ido con el suficiente cuidado y, por el otro, no se puede inculpar legalmente a un animal. Sólo hay una excepción: que el choque tenga lugar como consecuencia directa de una acción de caza colectiva. Así, el error o la negligencia sería del propietario del coto lindante con la carretera donde se produce la colisión.

Si se arrolla uno de estos seres, algo que en ocasiones es inevitable, lo primero que hay que hacer es detener el coche en el arcén, señalizar la zona y, siempre y cuando se esté seguro de que el animal ha muerto, intentar retirarlo de la carretera. A continuación, se debe llamar a la Guardia Civil de Tráfico para que registre el siniestro. Su informe será importante de cara a nuestro seguro, especialmente si sólo cubre a terceros. En pos de minimizar las probabilidades de atropello, maximiza tu cautela al circular por la noche en carreteras convencionales, sobre todo si se hallan en entornos rurales.