Precaución al volante: la alergia puede jugarte una mala pasada
La alergia y la conducción no son factores que se lleven precisamente bien. Estar alerta y aumentar la precaución al volante, dos factores clave.
Sí, es cierto, la primavera ya lleva tiempo con nosotros, pero no ha sido hasta hace apenas una semanas cuando el buen tiempo se ha instalado de forma más o menos estable. La combinación de buen tiempo y primavera suele traer consigo excursiones con la familia, escapadas con el coche, conducir con las ventanillas bajadas...y una alergia que puede ser de lo más molesta.
¿Tienes alergia al polen, a las gramíneas o a cualquier agente que multiplique su presencia en primavera? Si tu respuesta es afirmativa, lo primero que deberías hacer es tomar precauciones a la hora de coger el coche, sobre todo si se toman medicamentos para tratar la mencionada alergia. La mayoría de estos medicamentos pueden interferir en la conducción provocando somnolencia o falta de atención, asi que revisar y leer con atención el prospecto es básico.
Si tienes que coger el coche y sabes que sufres con la alergia, es muy conveniente que revises, antes de cada primavera, el estado del filtro del habitáculo de tu coche. Sustituirlo anualmente no es caro (no suele superar los 30€) y, si instalas uno con carbón activo, garantizas que la presencia de partículas en el interior del vehículo al activar la ventilación va a ser mínima.
¿Te gusta conducir con las ventanillas bajadas? No hay problema, pero si sabes que vas a cruzar zonas con vegetación abundante, es preferible que las cierres y actives la ventilación, a poder ser en modo recirculación, con el fin de depurar el aire lo mayor posible. Llevar agua para beber y unas gotas de colirio ocular mejorarán tu condición física si, en cualquier momento, sientes molestias por culpa de la alergia.
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