NO SON LOS QUE IMAGINAS
Con motivo de la operación retorno del verano, que verá su punto álgido el próximo 1 de septiembre, te aconsejamos qué comer y beber en un largo trayecto por carretera.
Con el final de las vacaciones de verano para la mayoría de personas, llega la temida operación retorno, donde millones de conductores se enfrentan a largas horas en la carretera para volver a casa. En estos trayectos, mantener la concentración y evitar la fatiga es crucial para la seguridad a bordo del coche. Sin embargo, muchas veces se subestima la importancia de la alimentación e hidratación adecuadas durante el viaje. Prepararse con la comida y bebida correctas no solo ayuda a mantener la energía, sino que también facilita la digestión y asegura que el viaje sea lo más cómodo posible.
A la hora de conducir largas distancias, es vital contar con alimentos que no solo sean fáciles de consumir, sino que también ayuden a mantener la concentración. Las frutas frescas de temporada estival como el melocotón, la uva y la sandía son muy buenas opciones. Estas, además de aportar vitaminas y minerales, tienen un gran contenido en agua que favorecen mantener la hidratación corporal. Por otro lado, nueces, almendras y otros frutos secos son excelentes para picar en el coche o durante un descanso en un área de servicio (por ejemplo). Son altamente ricos en grasas saludables y proteínas, proporcionando energía sostenida y evitando picos de azúcar que pueden fatigarnos.
Evitar comidas pesadas antes y durante el viaje es fundamental. Optar por sándwiches ligeros con pan integral, pavo o pollo, y vegetales es una excelente estrategia. Estos alimentos son fáciles de asimilar por nuestro organismo y no provocan sensación de pesadez, lo que resulta crucial para impedir la somnolencia. También es recomendable llevar yogures (siempre que puedan estar refrigerados) o barritas de cereales, que son prácticos de consumir y ayudan a mantener la digestión y el ritmo intestinal en orden.
Estar hidratado es esencial para evitar el cansancio y la falta de concentración. El agua es la mejor aliada en este sentido y se recomienda beber pequeños sorbos de manera constante durante el viaje. Además, el té verde o infusiones frías pueden ser una buena alternativa, ya que aportan cierta estimulación del sistema nervioso y los sentidos. Hay que evitar bebidas azucaradas y carbonatadas que puedan causar hinchazón o agotamiento.