Apple patenta un sistema para proyectar los retrovisores en el parabrisas

Durante los últimos años la industria del automóvil ha estado muy atenta a las numerosas patentes que Apple ha registrado en lo que concierne a un elemento tan simple como elemental, como solía decir Sherlock Holmes: el parabrisas. Se trata de la unión del funcionamiento del mismo (y las numerosas funciones que ejerce) con pantallas que muestran las imágenes que captan las cámaras de los espejos retrovisores, como las pantallas pequeñas que podemos ver en retransmisiones deportivas o más recientemente en sesiones de streaming. Es decir, un sistema donde el parabrisas sea, más que nunca, una pantalla hacia el exterior, aprovechando las bondades de la realidad virtual.

La patente funciona de la siguiente manera: Una o más imágenes se muestran a tiempo real, integradas en una ventana (el parabrisas en este caso). Estas imágenes se pueden corresponder tanto con la que podríamos ver en nuestros retrovisores como las de los laterales, lo cual podría ser de gran ayuda en situaciones como intersecciones o rotondas. También se aplicaría, evidentemente, a la cámara trasera, utilizada normalmente para las maniobras de estacionamiento. Con estas imágenes se podría crear una composición de vista de pájaro, similar a las cámaras 360 que tenemos a día de hoy.

Dado que en este caso hablamos todo el tiempo de imágenes que provengan de cámaras y no de retrovisores al uso, esto podría permitir que se prescindiera de retrovisores por completo, lo que supone una revolución en términos de diseño - tanto en estética a la hora de diseñar la carrocería como por los cambios que supone para el coeficiente aerodinámico. En ocasiones anteriores ya se ha flirteado con esta idea, pudiendo montar cámaras con un grosor mucho menor que el de un retrovisor convencional - eso sí, la cuestión es si habría cierto retraso en la imagen de la cámara desde que se capta hasta que se muestra en el parabrisas, aunque sean 3 frames (una media décima aproximadamente).

Según Carglass, esta tecnología podría ser posible a través de varios caminos, siendo uno de ellos con una pantalla laminada en la superficie exterior del cristal. Otro camino es que la pantalla esté integrada dentro del vidrio (recordemos que el parabrisas convencional de hoy día se compone de dos capas de vidrio unidas por una capa de polímero especial transparente), mientras que otra posibilidad es la que ya se ha visto en coches de producción: proyectar la imagen sobre el parabrisas y reflectarlas hacia el campo de visión del conductor.