EN TODA LA UE
La electrificación del parque automovilístico español no sólo no avanza al ritmo deseado, sino que este año se está ralentizando, con un descenso de las ventas de este tipo de vehículos respecto a 2023 y una reducción de su cuota sobre el total de vehículos nuevos matriculados.
Las ventas de vehículos eléctricos e híbridos enchufables, comprendiendo turismos, cuadriciclos, vehículos comerciales e industriales y autobuses mantienen en España una tendencia a la baja.
En España se vendieron hasta agosto 75.908 vehículos electrificados, un 3,4 % menos que en los ocho primeros meses del año pasado, lo que situó su cuota en el 9,4 % de todos los coches vendidos, frente al 10,35 % que tenía en el mismo periodo de 2023.
Frente a esos casi 76.000 vehículos electrificados, en los ocho primeros meses del año se vendieron 270.331 de gasolina, el 33,53 % del mercado, y 189.245 diésel, que supusieron el 23,47 %.
La patronal de fabricantes de automóviles, Anfac, considera que, con una cuota conjunta en las ventas en torno al 10 % y unas entregas mensuales cercanas a las 7.000 unidades, se está muy lejos de poder cumplir los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC).
El PNIEC fija como objetivo que en España haya 540.000 vehículos eléctricos enchufables en 2025 y 5,5 millones en 2030, previsión esta última que Anfac ve inalcanzable con la evolución actual.
Según el informe del Parque de Vehículos de 2023, en España había 339.125 vehículos electrificados al finalizar el año, un 50 % más que en 2022, pero sólo suponían el 1,3 % de todo el parque automovilístico (0,4 puntos porcentuales más que un año antes).
En los ocho primeros meses de 2024 las ventas de vehículos eléctricos (37.076 unidades) bajaron un 2,66 % frente al mismo periodo del año anterior y representaron el 4,6 % de todas las matriculaciones.
Las de híbridos enchufables, prácticamente parejas a las de eléctricos puros con 38.832 unidades, disminuyeron un 4,1 % respecto a los ocho primeros meses de 2023 y representaron el 4,82 % de todas las ventas.
Sin embargo, las ventas de híbridos no enchufables (coches que recargan la batería mientras se conduce, por lo que no están en el grupo de electrificados), sí aumentaron un 24,4 %, al sumar hasta agosto 248.853 unidades -el 30,87 % de todos los vehículos vendidos, superados sólo por los de gasolina-.
La mayoría de los vehículos electrificados vendidos son turismos (69.833 unidades del total de 75.908) y sus ventas cayeron hasta agosto un 1,74 % interanual, situándose su cuota en el 10,4 % de las ventas, por debajo del 11,06 % del mismo periodo del año anterior.
La cuota de mercado de los electrificados supera levemente la de los diésel -del 10,2 % en los ocho primeros meses del año, con 68.489 unidades vendidas-, pero sigue a gran distancia de la de los coches de gasolina (265.552 unidades que suponen el 39,54 % de todas las ventas).
Las ventas de eléctricos puros se están comportando mejor que las de los híbridos enchufables, al venderse hasta agosto 31.665 unidades, un 2,53 % más, aunque su cuota fue del 4,72 %, un poco por debajo del 4,81 % de un año antes.
Las matriculaciones de vehículos híbridos enchufables descendieron un 5,02 %, hasta las 38.168 unidades, pasando su cuota del 6,25 % en los ocho primeros meses de 2023 al 5,68 % en el mismo periodo de 2024.
La venta de eletrificados también se está debilitando en la UE, donde, según los últimos datos de la patronal de fabricantes europea, ACEA, en el primer semestre del año sus ventas bajaron un 0,4 % interanual y las de los híbridos enchufables, un 4,1 %.
En el índice europeo de penetración del vehículo electrificado, recogido en el Barómetro de Electromovilidad de Anfac, España se sitúa a la cola, sólo por delante de Italia (18,8 puntos), Hungría (18,7) y República Checa (14,8), y muy lejos de la media europea (40,5 puntos).
Los principales frenos para la extensión del coche eléctrico son los puntos de recarga y el mayor precio de los vehículos electrificados frente a los de combustión.
Según el Barómetro de Anfac, los puntos de recarga aumentaron un 10 % en el primer trimestre, hasta los 32.422 de acceso público operativos, un ritmo de crecimiento que, según Anfac, no permitiría cumplir la previsión para 2024 de finalizar con 64.000 puntos.
También aumentaron, en casi 900, el número de puntos de recarga fuera de servicio, hasta los 8.645, que suponen el 21 % de los 41.067 de acceso público instalados en España.
El precio ha sido hasta ahora otra de las limitaciones para la extensión del coche electrificado, aunque la llegada a España de modelos chinos, como los MG del fabricante SAIC o el Dolphin de BYD, a precios más baratos, están cambiando el panorama.
También están las ayudas del Gobierno, que ha prorrogado hasta el 31 de diciembre el plan de apoyo a la compra de vehículos eléctricos Moves 3, que finalizaba en principio el 31 de julio, y lo ha dotado con 350 millones de euros más, después de haber movilizado 1.200 millones a través del programa.
También estará vigente hasta final de año la deducción del 15 % en el IRPF (hasta 3.000 euros) por la compra de un coche eléctrico.
No obstante, el sector de la automoción lamenta la incertidumbre que existe sobre si en 2025 se contará con un nuevo plan Moves u otros instrumentos de apoyo a la compra del coche eléctrico.