LAS ASEGURADORAS SEGUIRÁN INCREMENTANDO SUS PRECIOS EN 2023
De media, una prima a terceros cuesta 40 € más que en 2022, pero ojo con las 'todo riesgo'.
La inflación en la industria del automóvil no solo está afectando a los productos, es decir, a los coches como tales, sino que también tiene importantes efectos sobre sus servicios auxiliares. Hablamos, por ejemplo, de sus revisiones, sus mantenimientos y sus reparaciones, pero también de sus financiaciones y de sus seguros. En este último caso, los precios han subido un 21% respecto al año pasado, lo que supera por mucho el incremento del IPC que comunican oficialmente desde las instituciones públicas.
Los motivos por los que asegurar un vehículo vale más dinero que antes son dos: un mayor número de accidentes de tráfico y un grave aumento del coste de los materiales necesarios para llevar a cabo un arreglo en taller tras un siniestro. Lamentablemente, pese a haber elevado sus precios por encima de una quinta parte en los últimos doce meses (porcentaje interanual entre el primer trimestre de 2022 y el mismo periodo de 2023), muchas compañías del sector garantizan que estos seguirán ascendiendo en el corto plazo a pesar de que la competencia entre empresas aseguradoras es alta.
Los seguros a terceros han pasado a significar cerca de 40 euros más al año de media para sus clientes, mientras que las pólizas a todo riesgo sin ningún tipo de franquicia han evolucionado, para mal, en alrededor de 400 euros. Actualmente, el primer tipo de contrato, que es más común y económico, requiere un desembolso de casi 400 euros, mientras que para el segundo, el cual cubre prácticamente cualquier contingencia, hay que pagar más de 2.000 euros en promedio sin que las ventajas o coberturas sean mayores. En determinados casos, el incremento ha sido superior al 30%, que es una proporción siete veces el Índice de Precios de Consumo de abril (2022 vs 2023).
Siendo un servicio obligatorio para la circulación y cuya falta de concierto es ilegal si se emplea el vehículo, esta escalada desmedida supone un golpe más para el 80% de las familias españolas que posee, al menos, un coche en propiedad. En este sentido, la suma de la dilatación del coste de las primas durante el presente año se estima en casi 700 millones de euros extra que tendrá que asumir la población con uno de los parques móviles más envejecidos de Europa. Automóviles cada vez más complicados de asegurar para unos operadores que siguen revisando sus márgenes de beneficio.