MÁS POTENCIA Y DEPORTIVIDAD
BMW ha actualizado también las versiones más deportivas de su Serie 4, los BMW M4 y M4 Competition, con nuevos detalles estéticos y más potencia para las variantes más prestacionales de la gama
La Serie 4 de BMW es uno de los modelos más icónicos y representativos de la firma alemana. Sus versiones deportivas, encarnadas en las variantes M4, se encargan de poner el punto picante con una estética más agresiva, una potencia y prestaciones sensiblemente mejores y una dinámica de conducción en la que la diversión y la efectividad vienen de serie. Tras presentar la renovación de las versiones matrices de la gama, BMW ha presentado también la actualización de sus M4 y M4 Cabrio.
El actual BMW M4 está disponible, al menos en nuestro país, con dos sabores diferentes. Podemos optar por la variante Coupé o bien, si buscamos el exotismo, podemos optar también por una variante Cabrio en la que el cielo puede convertirse en nuestro único techo aunque, eso sí, en ambos casos se combina con la planta motriz más potente disponible en la gama, bautizada como Competition, que supera los 500 CV de potencia.
Esta actualización se hace patente en el exterior, donde podemos apreciar unos nuevos grupos ópticos delanteros con tecnología láser y una distribución interna diferente y adaptada a la línea de diseño de los últimos lanzamientos de la firma bávara. Los pilotos traseros también cambian su diseño interior, mientras que la carrocería amplía su paleta con la llegada de nuevas tonalidades entre la que destaca la de la unidad que ilustra el artículo, en un color rosado de lo más llamativo.
En el interior desaparecen los mandos físicos para la climatización, sustituidos ahora por una superficie táctil. De cualquier manera, la mayoría de ellos se controlan a través de la pantalla central, de manera que el cambio en la usabilidad es mínimo. Se ha modificado también el diseño de las salidas de ventilación del salpicadero, mientras que el volante también modifica sus formas y ahora cuenta con un aro achatado que le otorga un aspecto más deportivo.
Mecánicamente también hay ciertos cambios, ya que la potencia del motor de tres litros y seis cilindros en línea aumenta ligeramente. Y es que BMW ha inyectado 20 CV adicionales a los 510 con los que ya contaba, de manera que el total que ofrecen ahora los BMW M4 Competition tanto en carrocería coupé como en carrocería descapotable suma ya 530 CV. Pese a ello las prestaciones -que ya son brillantes- no varían: con una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos en el caso de la variante de tracción trasera y 3,5 segundos en el caso de la variante xDrive, la velocidad máxima se limita a 250 km/h.