Bruselas propone transporte público gratis en jornadas de Alta Contaminación

Los protocolos por altos niveles de contaminación se están convirtiendo en una realidad muy habitual en las grandes ciudades europeas. Mientras que algunas urbes ya han optado por incluir en sus planes la prohibición de la circulación de los vehículos más contaminantes por sus calles a finales de esta misma década (Barcelona es uno de los ejemplos), otras han preferido adelantar sus planes y proponer a los ciudadanos alternativas en lo que respecta al transporte para las situaciones en las que se producen precisamente esos índices de alta contaminación.

Bruselas ha sido una de las primeras ciudades en las que se ha puesto sobre la mesa un sistema de transporte alternativo para estos episodios con el objetivo de reducir lo máximo posible el problema que puede suponer para los conductores tener que dejar el coche en casa. Ante la necesidad de acatar las directivas de calidad del aire de la Unión Europea, la ciudad estrenará una iniciativa que permitirá utilizar de forma gratuita el transporte público (autobuses, tranvías y metro) y el sistema de alquiler de bicicletas en días de buen tiempo. La fecha en la que se espera tenerlo implementado coincidirá precisamente con la llegada del verano.

No serán las únicas medidas implementadas por el Ministerio de Movilidad ante estas situaciones. También se reducirá en un tercio el límite de velocidad, así como la prohibición de la quema de leña para las estufas. El parque de autobuses municipal también será renovado por completo en la próxima década, con un compromiso que obligará a los responsables de este servicio a contar con autobuses eléctricos de cara a 2030. Tras dos días consecutivos en los que se han superado los límites de partículas contaminantes en el aire, el ayuntamiento ha decidido también poner a disposición un nuevo portal web y una aplicación en los que los residentes se puedan informar de los niveles de contaminación a tiempo real.

Según declaraciones de Pascal Smet (Ministro de Movilidad y Obras Públicas de Bruselas) a The Guardian, " la idea no es prohibir los autos en la ciudad, sino encontrar un nuevo equilibrio. La investigación demuestra que cuanto más espacio le das a los automóviles, más automóviles atraes. De hecho, las ciudades más amigables para los automóviles también son las más congestionadas”.