La lucha contra las emisiones contaminantes, cada vez más férrea
Los coches que contaminen mucho más de lo que deberían según la ley podrán irse en grúa, inmovilizados por los agentes de la autoridad.
Nuestros vehículos circulan por las carreteras gracias, entre otras cosas, a que lo hacen con arreglo a la ley: ajustándose a una serie de normas y reglas que, de no cumplirlas, hacen que nuestro coche no sea apto para circular de manera segura y legal en nuestro país. De controlar todo eso se encargan, principalmente, las ITV, aunque es imposible controlar todos los vehículos, uno por uno, de forma constante. VER VÍDEO.
Por eso, muchos conductores modifican sus vehículos y, pese a que la mayoría lo hace con arreglo a la ley, algunos deciden saltarse las normas y circular con sus vehículos sin que éstos cumplan con alguna de las leyes que regulan su funcionamiento. Una de las modificaciones más comunes, especialmente en motores diésel, es la de la anulación o mitigación de alguno de sus sistemas anticontaminación como las válvulas EGR o los filtros antipartículas.
La DGT contempla la posibilidad de que te vueltas a casa andando en lugar de en tu coche: sí, la DGT puede llegar a inmovilizar tu coche si contamina muy por encima del límite establecido y los agentes pueden demostrarlo o constatarlo. El procedimiento de inmovilización no implica una sanción ya que el vehículo puede haberse averiado justo antes, pero sí que implica su traslado a un depósito de vehículos donde el propietario tendrá que firmar un documento en el que se compromete a arreglarlo si quiere sacar de allí su coche.
La realidad es que casi ningún agente de tráfico tiene a su disposición un dispositivo capaz de medir las emisiones contaminantes que salen por el tubo de escape de un coche, algo que en Madrid quieren cambiar. Su alcalde, José Luis Martínez-Almeida, ha confirmado que se elevará al Pleno el texto definitivo de la nueva Ordenanza de Calidad del Aire y Sostenibilidad, en la que se contempla la posibilidad dotar a los agentes madrileños de diferente instrumental con el que medir las emisiones contaminantes de los vehículos en tiempo real.
Con esta medida se persigue mejorar aún más la calidad del aire y, porque no, también la seguridad vial ya que, en ocasiones, el humo que sale por el tubo de escape llega a ser tan denso que provoca incluso problemas de visibilidad, una actitud completamente inaceptable que quieren erradicar en la Comunidad de Madrid y que, posiblemente, se extienda rápidamente al resto del país.