EN VERANO AUMENTA EL PELIGRO
Revisar el coche, respetar las normas de circulación o realizar paradas recurrentes son sólo algunas pautas para minimizar los riesgos al volante que esconden las carreteras.
Sin duda, el verano es una de las épocas más esperadas del año, especialmente por las vacaciones que permiten disfrutar de merecidos días de descanso en lugares serenos. Sin embargo, es también un periodo marcado por un notable aumento del tráfico en las carreteras, especialmente durante las operaciones salida y retorno. Este incremento conlleva un mayor riesgo de accidentes, por lo que es crucial extremar las precauciones y seguir ciertas recomendaciones para garantizar un viaje seguro. Aquí van 8 de ellas:
1. Revisa el vehículo. Antes de emprender un largo viaje, es fundamental realizar una inspección del coche. Esto implica verificar el nivel de líquidos como el aceite y el refrigerante o el estado de los frenos y neumáticos. Prevendrás averías y siniestros.
2. Planifica la ruta. Conocer el camino a seguir y las alternativas disponibles ayuda a evitar imprevistos. Además, es recomendable consultar el estado del tráfico, así como las condiciones meteorológicas para elegir el mejor momento para viajar.
3. Respeta las normas. Mantener una velocidad y una distancia de seguridad correctas no solo es una obligación legal, sino una medida de seguridad vital. Conducir a un ritmo moderado y lo más lejos de otros vehículos permitirá reaccionar a tiempo.
4. Asegura la carga. No te la juegues llevando el equipaje desordenado o fuera de su sitio, que es el maletero. Almacenarlo correctamente es invertir en confort y en seguridad, especialmente para los más pequeños, que deben viajar sobre sus sillitas.
5. Descansa a menudo. La fatiga es una de las principales causas de accidentes y más durante el caluroso verano peninsular. Es esencial descansar bien antes del viaje y realizar pausas cada 2 horas o 200 km para estirar las piernas y despejar la mente.
6. Emplea el cinturón. El cinturón de seguridad es un elemento básico de protección, presente en cualquier coche moderno. Todos los ocupantes deben llevarlo puesto, con independencia de la distancia a recorrer. No es tan incómodo y es imperativo.
7. Evita distracciones. El uso del teléfono móvil y otros dispositivos electrónicos puede desviar la atención del conductor, incluso si lo está utilizando otra persona a bordo. Es importantísimo mantener la concentración en la carretera en todo momento.
8. Apuesta por la razón. El sentido común es, quizá, la recomendación más relevante. Maximiza la prudencia en condiciones adversas (como tráfico muy denso o baja visibilidad) y, por supuesto, deja aparcados el alcohol y las drogas si vas a conducir.