PUEDE EMPEORAR LA SITUACIÓN
Todo apunta a que el combustible podría estar a punto de sufrir una subida aún mayor de la experimentada las últimas semanas.
Fue después del confinamiento cuando el precio del combustible empezó a superar límites nunca antes rebasados. Con todo ello, la tarea de abastecer a nuestro coche, independientemente de que fuese diésel o gasolina, se tornó muy complicada para la mayoría de bolsillos. Pues bien, después de este periodo más bien calmado la situación podría retornar.
Esto se debe a las últimas acciones de Arabia Saudí en lo que a producción de petróleo se refiere. Y es que fue el pasado mes de junio que aplicarían un importante recorte en esta, y así ha sido.
Y es que fue el propio Ministerio de Energía Saudí el que anunció que se aplicaría dicho recorte. De esta forma, nos encontramos con una bajada en la producción de 1,5 millones de barriles diarios desde el pasado mes de julio, y durante prorrogable.
Pero la situación va más lejos, ya que también existe un recorte previamente confirmado de 500.000 barriles diarios hasta finales de 2024 con “el objetivo de apoyar la estabilidad y seguridad de los mercados petroleros.” Todo ello ha sido posible de la mano de un acuerdo con otros países que conforman parte de la OPEP+.
Y es que no debemos olvidar que la OPEP+, siglas que corresponden a Organización de Países Exportadores de Petróleo, producen alrededor del 40% del crudo a nivel mundial. Esto implica que sus decisiones afectan notoriamente al precio final que va a ver reflejado el cliente en el surtidor.
Sea como fuere, ya estamos viendo los primeros efectos de que el Barril de Brent haya subido un 1,5%. Concretamente, en España observamos que la gasolina 95 ha subido en apenas una semana algo más del 2%, mientras que el diésel 2,4% más. Y por supuesto también el propio Barril de Brent, que ha pasado de los 72 dólares que se reflejaban a finales de julio a los 82 dólares que marca ahora.