SE AMPLIA EL MARCO LEGAL
Los VMP tienen la misma consideración jurídica que otros vehículos, pero su regulación estaba en pañales hasta ahora. Muchos usuarios no cumplían con las normas.
La Dirección General de Tráfico, en vista del imparable aumento de la popularidad de los patinetes eléctricos, especialmente en las grandes ciudades españolas, ha decidido actualizar la normativa relativa a los Vehículos de Movilidad Personal, como es el caso. Entre las modificaciones anunciadas se encuentran nuevas medidas relacionadas con certificados de circulación, cursos formativos para usuarios y documentación referente a su fabricación.
La moda de los patinetes eléctricos, sobre todo entre los más jóvenes, no sólo está auspiciada por la practicidad y agilidad de estos VMP, sino por la alarmante pérdida de poder adquisitivo que viene sufriendo desde hace varios años este grupo poblacional. Sin embargo, se trata de un medio de transporte vulnerable en términos de seguridad y que, de hecho, ha provocado un aumento de la mortalidad vial en algunas urbes de nuestro país. ¿Sabías que hay cerca de cinco millones de unidades en este territorio?
Con base en su fácil y rápido acceso (son relativamente baratos y hay una gran oferta), su escasa protección frente a impactos (no llevan carrocería) y la falta de fiabilidad que presentan varios de estos productos (algunas baterías pueden arder o explotar), la DGT ha decidido endurecer la normativa que circunda esta clase de pequeños vehículos a fin de minimizar sus riesgos de siniestralidad, una gran lacra.
Hace poco, el organismo en cuestión ya determinó que los patinetes debían de tener un sistema de frenado, que sus conductores habían de usar un casco y que no podían circular por aceras o carreteras. Ahora, Tráfico ha establecido que cualquier VMP ha de tener un certificado de circulación acompañado de una identificación donde se indique que cumple con varios requisitos técnicos legales. Se trata de una placa de marcaje de fábrica con el número de serie e información sobre sus características.
La DGT ha dictaminado que esta documentación, la cual garantiza el cumplimiento de unos estándares de seguridad mínimos, no será necesaria hasta 2027 en el caso de los patinetes que hayan sido vendidos antes de enero de 2024. Por otro lado, la reforma de tal regulación tiene como objetivo la concienciación sobre la responsabilidad que conlleva el manejo de estos ejemplares y para ello se está diseñando un programa educativo y formativo gratuito que podría ser obligatorio.