CONTROLARÁN LA VELOCIDAD
Tráfico sustituye una quincena de cinemómetros dinámicos por avería o antigüedad y son carísimos, pues llevan tecnología de última generación para que nadie se escape.
Recientemente, la Dirección General de Tráfico ha realizado un pedido de 15 nuevos radares móviles, así como sus soportes homologados, a la compañía Tradesegur, la cual ganó una licitación pública para proveer de esta clase de equipos y otros relacionados con la movilidad al organismo en cuestión, dependiente del Ministerio del Interior. Tal encargo ha costado un total de 1.179.150 euros y su propósito es sustituir dispositivos similares que se han quedado obsoletos o se han estropeado por cualquier motivo.
A razón de 78.650 euros por dispositivo (aproximadamente lo que cuesta hoy en día un SUV de lujo nuevo), su tecnología sólo puede estar a la última. Tanto es así que esta clase de aparatosson capaces de controlar la velocidad de cualquier vehículo tanto en movimiento (por ejemplo, dentro de un coche patrulla de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil) como en estático (fijados a la cara interna de un guardarraíl o también mediante el uso de trípodes, siempre debidamente homologados).
El anuncio de la operación tuvo lugar el pasado martes, 14 de mayo de 2024, si bien fue adjudicada un mes antes, y según la DGT tiene el objetivo de seguir velando por la seguridad en nuestras carreteras. De hecho, esta quincena de radares o cinemómetros de gran precisión, que multarán aplicando siempre un margen de error sobre el límite establecido en cada vía, probablemente sean empleados por agentes de la ATGC en secundarias con altos índices de siniestralidad.
Fiables y bastante duraderos (parece que no ha habido que reponer tantos), pueden detectar infracciones en dos sentidos al mismo tiempo y en hasta seis carriles de forma simultánea, además de distinguir fácilmente entre vehículos ligeros (motocicletas y automóviles de turismo) y pesados (furgones, autobuses y camiones), ya que cada tipo está sometido a distintas limitaciones de velocidad máxima. Los excesos en esta línea son causa de muchas muertes por accidentes de tráfico en España.