SE ACABARÍAN EN 2025
Alemania se ha cansado de los ciudadanos que buscan aprovecharse de la ayuda para la compra de coches eléctricos sacando beneficios vendiéndolos a otros países, por lo que podrían terminar con el apoyo económico en 2025.
Cuando pensamos en comprar un coche eléctrico nos encontramos con un precio de adquisición elevado, y son muchos los gobiernos los que ofrecen una ayuda no solo para que adquirir estos coches sea más fácil, sino también para incentivar su uso y compra. Sin embargo, en países como Alemania ha caído la gota que colma el vaso, y no es otra que empresas y ciudadanos que se aprovechan de esta ayuda para revender más tarde el coche en otros países y así sacar beneficio.
Arroja luz sobre el asunto el periódico Financial Times, quien ha descubierto que más de 100.000 vehículos eléctricos de diversas marcas han sido vendidos en el extranjero con un claro sobreprecio en la última década. El país objetivo no es otro que aquel en el que no hay ayudas o que no son tan generosas como las que ofrece el gobierno alemán, asegurándose así que obtienen tajada.
Y es que los datos muestran que hay un mayor registro de vehículos eléctricos importados del extranjero que comprados en suelo nacional, esclareciendo así esta conducta. A ello debemos sumarle que se ha descubierto que, de los casi 100.000 Tesla que se registraron en Alemania en julio de este mismo año, tan solo 76.000 siguen circulando por sus carreteras.
La mayoría de los que han llevado a cabo esta jugada no esperaron ni un año para efectuar la venta, dejando patente como único objetivo venderlo más barato del precio de tarifa que hay en otros países pero más caro de lo que ha pagado ese alemán que pudo beneficiarse de una ayuda económica de hasta 6.000 euros.
Como es lógico esto no ha sentado bien al gobierno alemán, el cual ya ha anunciado que tomará medidas para evitar que suceda. ¿La más drástica? Retirar las ayudas ya no solo para vehículos híbridos enchufables, sino también para coches que recurran a un esquema mecánico 100% eléctrico.
Sea como fuere, esta medida no se aplicará de manera inmediata y tajante, sino que será paulatinamente, reduciendo la ayuda de los 6.000 a los 4.000 euros y aumentar el tiempo de espera para poder vender el coche, pasando de seis meses a un año, y de no cumplirlo tendrán que devolver la subvención.