Yandex es una empresa rusa de tecnología que se ha propuesto durante los últimos meses
el desarrollar su propio sistema de conducción autónoma dirigido a que lleve a todos sus clientes a sus destinos a través de su propia compañía de transporte privado. El pasado mes de noviembre, el equipo técnico al frente del desarrollo del primer vehículo de pruebas mostraba sus progresos sobre nieve, en este caso en un tramo de pruebas en el que
el Toyota Prius podía circular sin miedo a encontrarse ningún tipo de contratiempo más allá de la falta de agarre debido a las condiciones 100% invernales. Unas semanas más tarde, ha sido la propia empresa la que ha mostrado sus avances. Tras superar esta primera fase de pruebas, Yandex ha querido testar el
comportamiento de su vehículo en un entorno urbano. No es en uno cualquiera, ya que como campo de pruebas se han elegido las calles de la capital rusa, Moscú, las cuales se han cubierto un invierno más del blanco elemento en unas condiciones de frio extremo que acompañan tradicionalmente a la ciudad en esta época del año.
Según los responsables del proyecto, la prueba fue todo un éxito, en condiciones de tráfico real, con peatones ajenos al experimento y con una complicada ruta callejeando por el interior de uno de los
barrios más populares de Moscú. El coche pudo transitar a la perfección a pesar de las condiciones deslizantes del firme, avanzando lo que puede ser un futuro no muy lejano para el transporte personal en grandes ciudades en las que ya se ofrecen sistemas como el
car-sharing o plataformas como Uber.