Finalmente Volkswagen ha decidido lanzar el Golf Alltrack en el mercado estadounidense. En unos días será presentado en su configuración definitiva para este país con motivo del Salón del Automóvil de Nueva York. Disponible en Europa desde hace ya unos cuantos meses,
la filial para el mercado estadounidense no tenía muy claro si lanzarlo debido a los problemas surgidos tras el "dieselgate". Sin embargo la buena marcha de vehículos de concepto parecido como el Subaru Outback han terminado por convencer a los más incrédulos.
Estéticamente
el Golf Alltrack recibe el mismo maquillaje estético que puedes encontrar en la versiones europea, incluyendo los pasos de rueda ensanchados con apliques plásticos,
la suspensión ligeramente sobre-elevada, barras de techo cromadas y paragolpes de diseño específico. En el interior no hay apenas cambios y las novedades se reducen a la denominación "Alltrack"
junto a la palanca de cambios y las nuevas alfombrillas. Lo que sí tienen es una dotación muy completa en la que no faltan la climatización automática de dos zonas,
control de crucero, cuatro elevalunas eléctricos, freno de mano eléctrico, faros antiniebla, ordenador de viaje o el sistema de sonido integrado.
Al contrario de lo que sucede en Europa, en Estados Unidos la firma alemana ofrecerá varios niveles de acabado para adaptarlo mejor a los gustos de este mercado.
El básico toma la denominación S, el intermedio SE y el más completo recibe las siglas SEL. Todos ellos tienen en común el motor
1.8 TSI con 170 CV que se puede solicitar tanto con
cambio manual de seis velocidades como con la de doble embrague DSG con el mismo número de relaciones.
De serie en las tres versiones es el sistema de tracción total 4Motion. Lo que ya ha confirmado Volkswagen es que
no habrá versiones con motor diésel a corto plazo, quizás para tratar de hacer olvidar a los usuarios la mala experiencia vivida hace unos meses con el trucaje de los mecánicas.