Recargarlos cuesta la 'mitad' que echar gasolina
Con el precio de la luz por las nubes -aunque bajando-, a la hora de adquirir un coche nuevo nos preguntamos si circular con un vehículo eléctrico todavía es más barato que hacerlo en uno de gasóleo o gasolina. La OCU ha echado cuentas y un 'cero emisiones' sale ganando, y no solo por el coste de las recargas.
La escalada de los precios de la electricidad durante todo 2022 ha hecho que los ciudadanos se planteen, esta vez en serio, buscar alternativas o hacer habituales gestos que antes desdeñaban para reducir la factura de la luz. Sin embargo, en el caso de las recargas de los coches eléctricos, la comparación con los combustibles tradicionales ofrece otra perspectiva.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha analizado precios de luz y combustible y calculado cuánto cuesta recargar el coche con los precios de finales de 2022, frente a lo que suponía en 2020, antes de que comenzara el ascenso de los precios de la energía. Paralelamente, han comparado estos costes con los de un vehículo de combustión ya sea diésel o gasolina.
¿Cuánto han subido luz, gasolina y gasóleo en 2022?
Para elaborar una comparativa fácil de trasladar a cada caso particular, la OCU ha analizado el coste durante 12 meses para un usuario que recorre con un vehículo de cada una estas fuentes de energía unos 10.000 km/año con un coche de gama media.
En el caso de los vehículos de gasolina calculamos un consumo medio de 7 litros/100 lo que supone 700 litros para 10.000 km.
Para los vehículos de gasoil, hemos estimado un consumo medio de 6 litros/100 km, lo que supone un consumo para el diésel de 600 litros para 10.000 km.
Finalmente, para un coche eléctrico, en términos de consumo, esto supondría unos 2.000 kWh de electricidad. Partiendo del supuesto -generalizado- de que éste se recarga en casa por la noche durante el horario valle y con la tarifa regulada PVPC.
Así, la media anual en 2020 ofrece unos inequívocos datos finales de 825€, 644€ y190€, respectivamente. Con lo que el ahorro del eléctrico frente al gasolina asciende hasta los 635€ y unos 454€ respecto a un vehículo diésel.
La comparativa con datos de 2022, PVPC noviembre, asciende, respectivamente a 1.118€, 1.007€ y 580€. Con lo que el ahorro del eléctrico frente al gasolina asciende hasta los 538€ y unos 427€ respecto a un vehículo diésel.
La clave de este estudio está en el hecho de que, aunque el precio de la electricidad haya subido bastante, el de los combustibles fósiles lo ha hecho también.
Debido a ello, el vehículo eléctrico, sobre todo a largo plazo (también en un hipotético valor de recompra) continúa siendo más rentable a largo plazo, o al menos menos costoso.
Conclusión: la luz sube pero la mitad que la gasolina
Los usuarios de un eléctrico han sufrido en sus carnes -o bolsillos- una subida media según la OCU, de unos 390 euros, pero es que quien posee un gasolina paga 293 euros más que hace dos años, y en el caso del diésel, 363 más que en 2020.
Y eso que el precio se ha calculado con la aplicación de la subvención de 20 céntimos, recientemente eliminada.
Eso sí, en redes públicas una recarga puede costar tres veces más que en casa, única ventaja con la que cuentan la gasolina y el gasóleo, con cada vez más oferta, sobre todo de las llamadas gasolineras 'low cost'.