UNA MEDIDA YA FIRMADA
El compromiso con la Unión Europea por el que los españoles tendrán que pagar por circular por las autovías es una realidad. En Europa se hace así.
Aunque desde el Gobierno se niegue que en España se va a pagar por circular por las autovías es un hecho que se va terminar realizando. Así lo establece el acuerdo firmado por Pedro Sánchez con la Comisión Europea y no queda más remedio que llevarlo a cabo.
La realidad del pacto entre España y la Unión Europea es aspirar a los fondos europeos Next Generation. Por lo tanto, no se trata de una medida del Gobierno favorable a la Agenda 2030 y en contra de la combustión. Una de las líneas prioritarias marcadas por el Consejo de la Unión Europea para el ejecutivo español.
La cantidad que se recaude en estos nuevos peajes se destinará al mantenimiento de las carreteras. Unas carreteras que tienen actualmente un déficit de conservación de 10.000 millones según la Asociación Española de la Carretera. Sin embargo, poner peajes ha sido una decisión muy polémica, más aún si cabe en periodo de elecciones. Por ello, se trata de negar y ocultar que esta medida se vaya a establecer pese a la confirmación del director de la DGT, Pere Navarro.
La de los peajes no es una táctica extraña en Europa. De hecho, la gran mayoría de los países del viejo continente cuenta ya con una forma de pago por utilizar las carreteras ya sea abonando cada viaje o con una tarifa anual. Tan solo ocho de los territorios europeos cuentan con un sistema de carreteras completamente gratuito y únicamente dos forman parte de la Unión Europea: Letonia y Luxemburgo. El resto de los miembros tiene algún tipo de pago, aunque en algunos como Alemania es casi inexistente.
En España se planea hacer un sistema de pago por circular por la autovías similar al portugués. Esto se traduce en pagar por kilómetro recorrido o viñetas. De esta manera se pretende huir de la palabra peaje que tiene tanta mala fama.
Las viñetas consisten en un pago anual que permite el uso de toda la red de carreteras del Estado con completa libertad. Una tarifa con la que podrías circular sin problemas durante todo el año abonando una cantidad de entre 80 a 100 euros.
El pago por kilómetro viene explicado en su propio nombre. En este caso se instalarían una serie de arcos con cámaras que controlarían el paso de los coches y, según la distancia recorrida, al final del trayecto se abonaría la cuantía correspondiente. Se desconoce aún si este pago se realizará a través de cuenta bancaria o en las tradicionales casetas como hasta ahora.