SON DATOS MUY REVELADORES
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha comunicado los resultados de la campaña de vigilancia de los autobuses escolares, y las estadísticas son realmente preocupantes.
En muchas ocasiones los padres han de confiar a sus hijos a terceros, tal y como sucede cuando estos van y vuelven del colegio en transporte escolar. Teniendo en cuenta la multitud de familias en España que recurren a este servicio, la DGT ha realizado, como es habitual, una campaña de vigilancia de los mismos. ¿El problema? Que un 45% de los autobuses controlados en la campaña han sido multados.
Concretamente, esta campaña se llevó a cabo entre los días 22 y 26 del pasado mes de mayo. Así, la Guardia Civil pudo controlar a un total de 3.576 vehículos destinados al transporte escolar, de los cuales 1.622 fueron sancionados, provocando que se realizasen un total 2.809 denuncias.
No obstante, hay que aclarar que en esta ocasión el porcentaje de vehículos controlados ha sido superior al de ocasiones anteriores. De esta manera, los datos, tanto para bien como para mal, se elevan, aunque ello no es excusa para no exigir un mayor cuidado de estos servicios.
De esta forma, 825 sanciones del total corresponden a no contar con la autorización especial para realizar transporte escolar, mientras que 423 a no contar con un seguro de responsabilidad ilimitada tal y como exige la ley. Pero hay más, ya que en un total de 51 autobuses no se hacía uso del cinturón de seguridad porque no funcionaba correctamente, dejando así un incremento de esta irregularidad de un 1,6% frente a la anterior campaña realizada a finales de 2022.
Además, 100 autobuses de los controlados no ofrecían un buen funcionamiento ni de las puertas ni de las salidas de emergencia. A su vez, 29 fueron denunciados por no tener superada la ITV correspondiente, mientras que 189 por no contar con la señal V-10 y 19 por no llevar la luz de emergencia.
Pero el dato más escalofriante lo encontramos en que 14 de los conductores denunciados dieron positivo en control de drogas y 5 por haber superado el límite de velocidad. Ninguno de los conductores controlados durante la campaña dio positivo en alcohol.