BAJA DEFINITIVA EN UN CAT
A partir de abril de 2021 cuando llegue el final de su vida útil de cualquier vehículo, éste deberá ser dado de baja en un Centro Autorizado de Tratamiento (CAT).
A petición del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, del Ministerio del Interior y del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el Consejo de Ministros ha modificado una parte del Reglamento General de Vehículos de 1998. Un cambio con el que han añadido una nueva obligación que atañe a todos los vehículos y no sólo a los turismos: cuando llegue el final de su vida útil deberán ser dados de baja en un Centro Autorizado de Tratamiento (CAT).
Hasta ahora cuando gestionábamos la baja definitiva de un coche en el registro teníamos que recurrir a un CAT. Se trata de centros que no sólo reciben el vehículo, también llevan a cabo este trámite en la Dirección General de Tráfico (DGT) y realizan todo el proceso de descontaminación, clasificación y reciclado de los componentes del modelo en cuestión cumpliendo la normativa y con la autorización de la respectivas Administración Autonómica. Una vez completado todo el ciclo, lo acreditan mediante el Certificado de Destrucción, que, al mismo tiempo, justifica la baja definitiva.
Todos los vehículos
El objetivo de esta reforma es mejorar los procedimientos administrativos para llevar a cabo una correcta gestión de los residuos generados e incorporar nuevos mecanismos de control que eviten la exportación ilícita o no contrastada de residuos además de aportar mayor fiabilidad a los datos del Registro de Vehículos y mejorar la seguridad vial evitando la puesta en circulación de vehículos que no reúnen las condiciones técnicas exigidas legalmente.
La obligación sólo pesaba sobre los turismos, pero el Real Decreto que acaba de ser aprobado ha modificado el escenario: todos los vehículos susceptibles de ser matriculados por la DGT deberán acabar sus días en un CAT. Eso sí, esta es la más llamativa pero no es la única modificación que llega para impulsar una gestión más eficiente y segura de los residuos de los vehículos al final de su vida útil.
Híbridos y eléctricos
El documento especifica que cuando se traten de modelos eléctricos e híbridos, sobre todo a la de extraer las baterías, deberán disponer de profesionales con una cualificación específica. Y, además, se concreta cuáles son los criterios para diferenciar si las piezas trasladadas de un vehículo que se desguaza se consideran residuos o productos con el objetivo de facilitar su reutilización como repuestos.
Por último, se añaden los requisitos mínimos que deben cumplir todas las instalaciones, se regula la baja electrónica de los vehículos descontaminados, los trámites de entrega y las obligaciones de descontaminación por parte de los CAT.