Por seguridad
Después de tantos días seguidos sin moverse, los neumáticos pueden sufrir consecuencias, como deformaciones, que harán necesaria una revisión cuando se vuelva a usar el coche.
La Comisión de Fabricantes de Neumáticos ve "imprescindible" revisar el estado de las cubiertas tras el confinamiento, ya que muchos vehículos permanecerán estacionados durante varias semanas y esto puede acarrear consecuencias. En un comunicado, los fabricantes han explicado que los neumáticos pueden sufrir deformaciones debido a que todo el peso del vehículo recayó en el mismo punto durante las semanas que el coche estuvo sin moverse.
Por ello, el caucho podría haberse aplanado y hasta que al circular vuelva a su forma habitual, podría provocar vibraciones. Sin embargo, en algunas circunstancias esta deformación puede persistir.
Otro de los inconvenientes que pueden sufrir los neumáticos es su agrietamiento. Este problema tiene más relación con la edad de la goma que con la situación de paralización, pero con el vehículo parado puede agravarse. También cabe revisar la presión de los neumáticos tras el confinamiento, ya que previsiblemente haya disminuido.
"Nos encontramos en una situación similar a la estival. Coches parados en una misma posición mucho tiempo, en ocasiones en la calle y bajo las inclemencias del tiempo", han explicado desde la Comisión de Fabricantes de Neumáticos.