Si pasamos por alto las numerosas versiones del Bugatti Veyron, posiblemente el
Pagani Zonda ha sido uno de los vehículos que más tiempo ha permanecido en el mercado gracias a las distintas modificaciones y ediciones especiales que han ido comercializándose durante los años. Esto ha permitido que, aunque actualmente los
protagonistas del catálogo del fabricante italiano sea el Huayra, tanto en su versión BC como en la Roadster, el Zonda ha saltado a la palestra con su renovada edición Fantasma Evo. Sin embargo, esta unidad en imagen no estará disponible para su compra. Curiosamente, antes de ser modificado, este
Pagani Zonda Fantasma Evo ya tenía dueño, e incluso ya había sido anteriormente actualizado por el propio fabricante. Sin embargo, cuando hablamos de superdeportivos, nunca es suficiente. En concreto, esta unidad
comenzó siendo un Zonda F. No uno cualquiera, ya que su destinatario, un dueño que vivía en
Hong Kong, pidió a Pagani que se hiciera una modificación y situaran el volante a la derecha, convirtiéndose en el primer Zonda que se ensamblaba en dicha configuración.
Esta transacción se realizó en 2005. Siete años después
un fuerte accidente contra un semáforo dejó prácticamente irreconocible esta unidad del Zonda F en color naranja, tanto en lo que respecta a su mecánica, como en materia de carrocería. En lugar de declararlo siniestro total e intentar vender los pocos restos supervivientes a través de Internet,
el dueño se decidió a mandarlo de nuevo a Italia, seguramente por el vínculo emocional que le ligaba a dicho vehículo. Fue en este proceso de reconstrucción en el que se le bautizó con el nombre de Pagani Zonda Fantasma. Tras volver a la circulación en 2014, el dueño quiso remozarlo y lo envió por segunda vez a Italia, permitiendo que Pagani hiciera todavía una máquina más extrema que
ha recibido el sobrenombre de Fantasma Evo, comenzando por un nuevo propulsor de 7.3 litros V12 atmosférico que es capaz de entregar hasta
760 CV de potencia. El
kit aerodinámico también ha sido actualizado, con nuevas entradas de aire y un spoiler trasero completamente rediseñado. Para la carrocería se ha optado de un tono oscuro de rojo, integrado en una librea que deja al descubierto en ciertas áreas la fibra de carbono en la que está fabricado dicho elemento exterior. El conjunto es todavía más espectacular, capaz de ensombrecer incluso al más actual de los Huayra.